La destreza de Ruud en arcilla no fue suficiente ante el talento del que llegara a ser, hace un lustro, tercer mejor jugador del mundo. Ruud, finalista hace dos semanas en Miami, superado por Carlos Alcaraz, no encontró la forma de condicionar el juego de Dimitrov, al que había podido vencer el pasado año en el torneo de San Diego.
Ruud acumula buenos registros en arcilla. De los siete trofeos que presume, seis han sido en polvo de ladrillo incluido el único que ha conseguido este 2022, en Buenos Aires.
No va a poder repetir el noruego, séptimo del mundo, su buen papel del pasado año en Montecarlo, cuando alcanzó las semifinales donde le frenó el ruso Andrey Rublev. Ni siquiera pudo alargar el encuentro al tercer set. Dimitrov estuvo mejor y resolvió el choque en hora y media.
El búlgaro, que este año tiene su mejor papel en las semifinales de Melburne y en los cuartos de Indian Wells y Delray Beach, alcanza su décima participación en Montecarlo donde se situó a un paso de la final en el 2018. Entonces cayó contra Nadal que logró el trofeo.