Además de repasar la situación institucional del Sevilla Fútbol Club tras la junta general de accionistas y lo que puede deparar el futuro en este plano de la entidad de Nervión en los próximos meses, José María del Nido Benavente también ha hablado sobre la situación deportiva del equipo, al que a su juicio hace falta poner orden. "El equipo está jugando sus encuentros con demasiada ansiedad, habría que echar el balón al suelo, habría que cerrar la puerta del vestuario con todo el mundo dentro, el presidente debería poner las cosas muy claritas y no es necesario chillar, sí hablar. Sin palmaditas a pie de césped, fotitos, no hablo... Vamos a coger el toro por los cuernos, a capitanear la sociedad, vamos a echarle ese empuje necesario y estoy seguro que no hay plantel para lugar por el descenso aunque hay que darle algunos retoques", ha explicado en Deportes Cope Sevilla.
Y para volver a ver un Sevilla victorioso y luchando en la zona alta de la tabla clasificatoria, Del Nido Benavente seguiría contando con el director deportivo del Sevilla, un Monchi que no es fundamental, pues "fundamental tan sólo es el escudo, la bandera y la afición". "El resto sobramos todos. ¿Sobre esta base es importante y aprovechable Monchi para el nuevo proyecto? Categóricamente sí. Dirigido, mandado y ordenado por el consejo de administración, como en todos los clubes. Aquí el que se equivoca es el presidente, y cuando se acierta, es para el director deportivo, pero la responsabilidad es del presidente", ha añadido.
También aludió el expresidente nervionense a su relación con su hijo José María del Nido Carrasco, actual vicepresidente, y del que pidió que no se le utilizara como arma arrojadiza: "José María del Nido Carrasco es un problema mío, que soy su padre, yo pediría que no se utilizara como un baluarte o una lanzadera. El presidente Castro lo utilizó como arma contra mí, es mi hijo, mi problema y yo le buscaré una solución a ese problema, hasta que me muera, pero vamos a dejar a José María del Nido Carrasco fuera de esta guerra, que no tienen nada que ver".
Por último, José María del Nido Benavente también trató el asunto del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán y explicó por qué es más conveniente construir uno nuevo que reformar el actual: "Hay un proyecto que yo dejé con un tercer anillo y una cubierta, pero reformarlo no nos permitiría hacer el estadio del futuro. Para optimizarlo hay que vaciarlo y hacerlo nuevo. Para que pueda tener un uso 365 días al año, con eso se obtendría una rentabilidad superior que si solo se abre para los partidos. Por eso el proyecto de un estadio nuevo, yendo a la Cartuja si nos lo permiten las autoridades o bien dentro del estadio y limitando las gradas como han hecho otros clubes. Pero debe ser un estadio para 60 o 70 años y con una capacidad para 60.000 o 70.000 espectadores".