El tema arbitral continúa en primera línea de debate en LaLiga. A las múltiples decisiones sobre el verde que han hecho que no pocos clubes levanten la voz públicamente al sentirse perjudicados, les ha seguido el rumor de que los árbitros estarían planteándose detener la competición doméstica por el alto grado de hostilidad que están sintiendo en los estadios; y sí, todo esto mientras el Caso Negreira ha alimentado las suspicacias hasta niveles desconocidos.
Sin ser vehemente u hostil, anoche fue el turno de Carlos Carvalhal. El entrenador del Celta de Vigo, molesto sin duda tras caer 0-1 en Balaídos ante el RCD Mallorca, envió también su mensaje para el estamento arbitral. En el caso del portugués, no se quejó de las decisiones en sí, sino de la manera de gestionar las pérdidas de tiempo, algo que entiende se podría mejorar con un plan tan revolucionario como sencillo."El ejemplo del Mundial no ha sido seguido por la mayoría de las ligas. En el Mundial hubo descuentos de 10, 12 o 15 minutos y eso no pasa ahora. No aprovechamos esa oportunidad para combatir la pérdida de tiempo", afirma antes de dejar claro que tiene la solución 'perfecta' para que se imparta justicia real cuando se trata de recuperar el tiempo en el que el balón no ha estado en juego.
"No como lo hace en el balonmano, pero sí para saber cuánto tiempo se pierde cuando el juego está parado por una lesión o una sustitución. Soy defensor de que el cuarto árbitro, y no el VAR, utilice un cronómetro", sentencia.
Si hay alguien que seguro apoya sus palabras –aunque quizás no el método esgrimido– ese es Quique Setién. El ahora entrenador del Villarreal CF es un fiel defensor de lo que él entiende que debe ser un juego limpio en el que si un equipo pierde tiempo, este debe ser duramente penalizado. Tras perder 1-2 ante el Real Valladolid, se volvió a quejar de ello.
"Si tienes un equipo que ha estado interrumpiendo el juego un montón de veces debemos seguir, han sido muchas situaciones en las que han perdido tiempo y no estamos de acuerdo en ello. Yo no creo que sea una cuestión de Fair Play", señaló.
Aunque pusiese el foco en el tema arbitral, Carvalhal no tuvo problemas igualmente en dejar claro que su equipo no estuvo bien ante el Mallorca y que les costó crearle peligro.
"Es difícil porque defienden con un bloque bajo. En la segunda parte jugamos más con el corazón que con la cabeza. Tuvimos una gran ocasión para marcar en ese disparo de Tapia, la posesión fue nuestra, pero esos datos no sirven de nada. Nos quedan nueve partidos por delante para seguir sumando, intentaremos hacerlo ya el próximo sábado en el Santiago Bernabéu", concluye.