El Cádiz CF vive horas bajas. Bajó a Segunda división la temporada pasada y no es capaz de encontrarle el pulso a la categoría. Le encomendaron el proyecto a un experimentado entrenador como Paco López pero transcurrida diez jornadas del campeonato se encuentra en puestos de descenso a Primera Federación con sólo diez puntos en su casillero. El técnico amarillo está cuestionado y la destitución comienza a valorarse en los despachos del Nuevo Mirandilla. Hay jornada intersemanal en la bautizada LaLiga Hypermotion y los andaluces jugarán este miércoles ante la SD Eibar en Ipurúa. La premura del encuentro ha hecho que el míster tenga un cartucho más en la recámara.
La derrota del Cádiz este pasado fin de semana ha hecho daño en la afición. El Racing de Santander se llevó los tres puntos de la Tacita de Plata con un solitario gol en la segunda parte. Los de Paco López no carburan a pesar de su propuesta valiente, ofensiva y de dominio. Las críticas no se han hecho esperar e incluso llegan de antiguos miembros de la entidad como Álvaro Cervera. Uno de los entrenadores más exitosos de los últimos tiempos se ha referido recientemente a la situación del equipo y ha creado un incendio.
Cervera es una leyenda para el cadismo. Llegó en 2016 y se marchó en 2022. Consiguió dos ascensos. De la extinta Segunda B hasta la Primera división. Voz autorizada de lo que pase en el club, cuestionó públicamente la forma de jugar del club y su de compañero de profesión: "El Cádiz es un poco como que se siente casi obligado a ascender al año siguiente del descenso y se encuentra en una situación que no es fácil. Me llama la atención que Cádiz y Almería son los más goleados, no es porque sean malos defensores o porque tengan malos defensas o no defiendan bien. Es porque se sienten obligados a algo que les hace ser equipos muy vulnerables. Cada uno lo ve de una manera, pero en Segunda no es esa la forma de manejarte", dijo en el programa Play Segunda de la Cadena SER.
Ha sido este martes cuando ha llegado el turno de respuesta de Paco López. En la rueda de prensa previa al partido de Eibar, ha lanzado un 'dardo' hacia Cervera: "No voy a valorar lo que dijo, pero sí que os diré que yo nunca jamás criticaría la idea de otro entrenador por muy distinta que sea la mía. Y menos, en determinadas situaciones", dejó claro.
Sobre el origen de la críticas y la manera de defender de su equipo, comentó: "Hoy en día hay pocos equipos que se metan atrás a defender. No creo que haya equipos que en los primeros 25 minutos genere lo que nosotros generamos. Es cierto que en la segunda parte se nos cae todo. Sinceramente yo echo de menos un poco más de atrevimiento con balón, pero también sé que los futbolistas tienen miedo a fallar, miedo a equivocarse. Estoy convencido de que en cuanto los resultados sean mejores, estos jugadores se atreverán a hacer muchas más cosas".
Por último, defendió a la plantilla y asegura que trabajan al máximo para revertir la situación: "No nos debe importar, aunque a veces tu público te pueda silbar en momentos determinados. Los futbolistas son humanos y tienen sentimientos, les duele. Pero esta es nuestra profesión y tenemos que saber convivir con eso. Cuando las cosas van bien pues la gente te lo reconoce. Yo les hago entender a los jugadores que cada aficionado está en su derecho de protestar, la gente va con ilusión al estadio, se gasta el dinero del año en el abono y este año quiere ver a su equipo arriba. Que no les quepa la menor duda de que, aunque les entendemos, el equipo lo quiere hacer lo mejor posible".