Dani Alves continúa en prisión intentando adaptarse a su nueva entre rejas. Según 'La Vanguardia', varios compañeros de la cárcel de Brians 2 y empleados de la misma con los que habría hablado el futbolista serían testigos de la supuesta confesión del brasileño.
El propio Alves asegura, según el citado medio, que allí es "uno más". "El futbolista se ha quedado fuera, y el Dani que está aquí es uno más. Aceptaré lo que venga", habría confesado el lateral diestro a un grupo de reclusos que le acompañan en su módulo.
"Me fui de casa con apenas 15 años. He superado en mi vida situaciones muy difíciles y complicadas. Esta será una más que pasará. No me asusta nada", habría comentado también el jugador brasileño, siempre según la información del mencionado periódico.
Alves también habría insistido en que no violó a la joven, sino que se trató de una relación consentida, aunque cuando sus compañeros de módulo insisten en lo ocurrido la noche del 30 de diciembre en Barcelona, el brasileño decide guardar silencio.
El futbolista nacido en Juazeiro, dentro de la ciudad de Bahía, intenta ser uno más dentro de la cárcel, habiendo jugado ya su primer 'partidillo' con otros internos e incluso firmando autógrafos. Además, por ahora comparte celda con una persona también conocida, aunque no a su nivel, el que fuera escolta de Ronaldinho Gaucho y portero de varias discotecas.
Será este lunes, 30 de enero, cuando su abogado, el mismo que en su momento defendió a Messi o Jordi Pujol, presente, si todo va según lo previsto, un recurso para intentar que el brasileño salga de la cárcel en libertad condicional y a la espera del juicio.
Con la actual ley, las penas que podrían caerle al futbolista brasileño van de los cuatro a los doce años de prisión. Todavía se desconoce cuándo se podrá dictar sentencia, pero si a Alves le deniegan la libertad condicional pasará una larga temporada en las instalaciones de Brians 2, puesto que el juicio final no llegaría antes de un año o año y medio.