Los Lakers, sin LeBron ni Davis en un momento clave

Las cosas no mejoran por Los Ángeles. Tras un inicio de campaña más que turbulento, parecía que el oro y púrpura volvía a sonreír con una buena racha de juego que les acercaba al objetivo (para ellos obligación) de entrar en playoffs. Sin embargo, este apunta a seguir siendo un año de sufrimiento; tanto es así que ni el retorno de Anthony Davis ha servido para apaciguar un entorno que ve como tener a El Rey en sus filas no les asegura ni estar en la lucha por la corona de la NBA.

En esa tesitura, no solo fuera de puestos de playoffs, sino también a cierta distancia del salvavidas del play-in, los angelinos visitan esta noche Nueva York para enfrentarse a Brooklyn Nets sin contar con sus dos estrellas. Así es, los californianos se encuentran en un momento clave y lo están viviendo sin tener a sus puntales en plenas condiciones físicas. Para ser exactos, LeBron James tiene problemas en su tobillo izquierdo, mientras que Davis necesita cuidar su pie derecho, el cual le ha tenido más de un mes alejado de las canchas. No son dolencias graves, obvio, pero en estos momentos cualquier piedra en el camino puede convertirse en un auténtico muro para los de Hollywood.

Hablamos de un muro porque ni con un mayúsculo LeBron James de 30,2 puntos, 8,5 rebotes y 7,1 asistencias de promedio (y con 38 años) les está dando para marcar ciertas diferencias en una Conferencia Oeste no tan salvaje como antaño, y es que solo un par de equipos (Denver y Memphis) están siendo capaces de desmarcarse del resto. Los angelinos por su parte, con un balance negativo de 23-27, se encuentran con el agua al cuello. Les restan 32 partidos y cualquier derrota puede ser determinante para la resolución de su temporada.

Lo cierto es que están a tiempo, pero el calendario tampoco ayuda. Tras jugar en cancha de los Nets, tienen otros tres encuentros en la carretera en los que no pueden permitirse salir de vacío. Primero visitarán al otro equipo de Nueva York, los Knicks, y seguidamente pasarán por Indianapolis para enfrentarse a los Indiana Pacers y por Luisiana para intentar batir a los New Orleans Pelicans (un rival directo para ellos). Lo dicho, no se encuentran en un situación desesperante, pero tampoco pueden permitirse la licencia de tener a sus dos jugadores más determinantes sin pisar el parqué.