El tenis femenino ha tenido una dominadora histórica en los últimos tiempos en la figura de Iga Swiatek, que se ha erigido como la mejor del mundo gracias sobre todo a dominar la temporada de tierra batida con una superioridad aplastante, y que eso, al menos este año le está sirviendo para mantener el número 1 de la WTA. Pero todo hace indicar que no por mucho tiempo, porque poco más de un año después de lograrlo por última vez, Aryna Sabalenka está muy cerca de volver a conseguir el cetro que la acredita como la más fuerte del circuito.
De hecho, solo 69 puntos separan a la polaca de la bielorrusa, después de que esta se impusiera en el torneo WTA 1000 Wuhan. Un triunfo que se suma al que consiguió apenas hace una semana en otro WTA 1000, en este caso en Pekín. Y es que el buen momento de Sabalenka, sumado a la ausencia de Swiatek del circuito desde el pasado US Open, han propiciado el acercamiento de la bielorrusa a la cima de la tabla general y su liderato en la Carrera hacia las Finales WTA de Riad.
Ya son diez los torneos en los que Iga no ha estado presente, dedicada a recomponer su equipo tras la marcha de su entrenador Tomasz Wiktorowski. Además, tiene los torneos que vienen por delante no son especialmente de su estilo, por lo que podría ser muy pronto cuando se confirme el 'sorpasso'.
La estadounidense Coco Gauff, semifinalista en Wuhan y finalista en Pekín hace una semana, es ahora tercera en el ránking, tras superar a su compatriota Jessica Pegula. La de Georgia se ha reencontrado con su tenis en este tramo final de camapaña después de unos meses muy alejada de su nivel y ahora vuelve a ser la gran alternativa al dúo dominante.
Por otro lado, la brasileña Beatriz Haddad Maia gana dos posiciones y vuelve a meterse en el top-10, igualando su mejor puesto de siempre. Mientras Paula Badosa sigue progresando en la tabla y sube otro escalón, hasta el decimocuarto, pese a no haber podido jugar en Wuhan por problemas gastrointestinales, lo que le hubiera dado la opción de subir aún más puestos. Y es que el sueño son las WTA Finals, pero ahora, con Qinwen Zheng en un momento muy dulce que casi asegura su presencia, para conseguirlo la española necesitaría una debacle sin precedentes de Emma Navarro y ganar absolutamente todo lo que juegue hasta Riad.