Rafa Nadal se encuentra esta semana preparando su gran objetivo del año, los Juegos Olímpicos de París, de una forma muy especial, y es que está disputando el torneo de Bastad, el cuál ganó con 19 años en 2005, y donde pese a usarlo como entrenamiento, aspira a todo. Ayer venció a Leo Borg en primera ronda, y ya le espera en segundo -octavos- Cameron Norrie, pero por lo pronto ya sabe que no va a tener un gran rival. Su compañero del dobles, Casper Ruud, que ha sufrido una derrota más que inesperada contra el brasileño Thiago Monteiro.
El noruego y el manacorí están disputando juntos el dobles, donde hoy juegan contra Arribage y Safiullin, preo también están en el cuadro de singles. Ahí el escandinavo, que pese a ser el tercer cabeza de serie, conociendo su dominio de la tierra, se le podía considerar el gran favorito. En ese contexto se plantó en el evento, y en su debut tenía un problema interesante. Pese a ser el 85 del mundo, Monteiro lleva una temporada terrícola más que decente, con los octavos de Roma y la tercera ronde Madrid como resultados más destacados. Además, en Madrid le ganó a uno de los grandes favoritos, el griego Stefanos Tsitsipas, ganador de Montecarlo unas semanas.
Pero más allá de eso, la de Ruud es la gran victoria de su temporada. Además ha sido por la vía rápida, en dos sets, sin demasiada lucha y con Ruud muy muy lejos de su nivel. En el dobles se le vió cómodo, muy consistente y sacando bastante bien, pero nada más lejos de la realidad. Por que le ha pasado por encima en la pista sueca. En el tercer juego ya había perdido un saque, muestra de que agusto no estaba, pero además, poco después, en el 9, volvió a conceder un break.
El segundo set fue incluso más fácil para Monteiro. El carioca mantuvo todos sus saques sin el más mínimo problema, no dando ni una sola oportunidad a Ruud de romper. Además, en el octavo consiguió un 'break' que a la postre fue definitivo para el doble 6 a 3 que le dio la clasificación para los cuartos. Ahora Monteiro se enfrentará al ganador del duelo entre el octavo favorito, Pavel Kotov contra el croata Ajdukovic. Por otro lado, Ruud ahora se puede centrar, además de en dobles, donde vuelve a jugar en unas horas, en llegar a París lo mejor posible, porque visto lo visto, tiene trabajo.