A sus 22 años Jannik Sinner ya forma parte de ese selecto grupo de tenistas que ha ganado al menos un Grand Slam. El italiano, quien ha progresado enormemente en los últimos meses, puso la guinda a una excelente actuación en el Open de Australia remontando dos sets abajo en la final ante Daniil Medvedev para terminar ganando y dejar claro que ha llegado a la élite del tenis mundial para quedarse.
Su presente y futuro es espectacular, algo que no le impide admitir que por momentos tuvo dudas. Tras proclamarse campeón en la Rod Laver Arena, ha participado en la clásica sesión fotográfica que hacen los ganadores del torneo y allí mismo ha atendido a los medios para echar la vista atrás, analizar su recorrido y explicar lo ocurrido con Carlos Alcaraz, a quien manda un emotivo mensaje a raíz de la inspiración que ha supuesto para él. El español tiene dos majors en su palmarés a sus 20 años: el US Open de 2022 y Wimbledon 2023.
"No dormí mucho, pero son grandes emociones, poco a poco me doy cuenta de lo que he hecho. Me gustaba ver ganar a Carlos todo lo que ganaba tan joven. Nuestra relación es muy buena pese a la rivalidad en los partidos y espero que el título que he ganado nos haga crecer a los dos", comenta el transalpino.
Lo cierto es que Alcaraz ha abierto un camino que pocos ven posible a tan temprana edad, siendo esta una circunstancia que directamente agradece uno de los entrenadores del tenista italiano, Darren Cahill.
"Ver a los jugadores jóvenes salir adelante y tener éxito impulsa a todos, no solo a Jannik. Nosotros tenemos que analizar por qué triunfa, cómo, y replicarlo. Carlos ha abierto el camino, estamos agradecidos, es una delicia verle jugar y aspiramos a ser tan buenos como él; ojalá seamos mejores algún día. Ahora le estamos persiguiendo y seguiremos haciéndolo", comenta el preparador italiano.
Es lo que muchos esperan. Mientras Novak Djokovic va poco a poco diciendo adiós y Rafa Nadal aún lucha por cortarse la coleta sobre la pista, Sinner y Alcaraz representan esa nueva hornada de raquetas que deben liderar durante la próxima década; eso sí, con el 'permiso' de otros grandes establecidos como pueden ser Daniil Medvedev o Alexander Zverev. Sí, el fin del trío mágico está más cerca, pero lo que viene por detrás es realmente emocionante.