Francisco Salas3 min lecturaEl tenis femenino ha vivido en los últimos años una estabilización muy importante, y es que tras unas campañas muy extrañas en las que lo raro era ver en las rondas finales de los grandes torneos a las tenistas de la parte alta del cuadro, todo volvió a una relativa normalidad y la nueva generación, formada por Swiatek, Sabalenka, Gauff, Rybakina y compañía, se erigió como la gran dominadora del circuito, y la que cimentaba y cumplía el favoritismo casi en cada gran cuadro. Un muestra es el año pasado, donde entre las tres primeras se repartieron los grandes, salvo un pinchazo en Wimbledon. Sin embargo, este año está cambiando, porque a todas les está costando encontrar su nivel, aunque la que vive un peor momento es Coco Gauff, quien además defiende muchos puntos, al ser la campeona actual del US Open.
En Toronto, el primer WTA 1000 de la gira norteamericana, se cruzó en octavos de final contra la rusa Diana Shnaider, quien la arrasó en dos sets, sin darle la más mínima opción, aunque al menos había ganado en su debut a la china Yafan Wang por la vía rápida. Y destacamos esto porque en Cincinnati, la de Atlanta tenía un primer partido de mucho nivel contra la kazaja Yuliya Putintseva, número 34 del ranking mundial. Pero la de Europa del Este no se amilanó ante nada, y acabó por firmar una gran victoria en la segunda ronda contra la estadounidense por 6-4, 2-6 y 6-4 en una hora y 54 minutos.
La kazaja comenzó muy bien, jugando con solvencia, con una bola que le corría mucho y evitando que su rival le contrarrestase con su potencia, y pese a que ambas perdieron su servicio, el punto álgido fue el noveno juego, donde una rotura de Putintseva que confirmó al saque le dio el set. Aunque en el segundo la tenista local volvió por sus fueros y muy pronto ya había encarrilado la contienda, para cerrar con un 2 a 6.
Tras ese holgado parcial todo hacía indicar que iba a tocar ver una remontada, sin embargo, nada más lejos de la realidad. La manga final se pareció mucho más a la primera, y pese a dejarse un saque la europea, Gauff se hundió inexplicablemente y perdió los siguientes cuatro juegos y confirmó su eliminación. Ahora le quedan por delante 10 días para replantearse su estrategia de cara a su gran momento, donde una derrota de este estilo le haría perder muchísimos puntos. Por otro lado, Yuliya será la rival de Paula Badosa en octavos de final, lo que limpia un poco el cuadro de la española.