El análisis del Atlético-Sevilla FC

Ni por hache ni por el VAR

Ni por hache ni por el VAR
Gudelj suplió la baja de Fernando como un pivote híbrido. - Alejandro Sáez
Alejandro SáezAlejandro Sáez 2 min lectura
Meritorio empate el conseguido por el Sevilla FC en el Wanda Metropolitano, manteniendo a un rival directo como el Atlético de Madrid a dos puntos de distancia. Y es que los de Nervión pudieron ganar tanto el partido como perderlo, consiguiendo adelantarse en el marcador gracias a una excelente definición en el área de De Jong. Sin embargo, el VAR y una dudosa mano de Diego Carlos en el área fue suficiente para que Morata empatara el encuentro y Joao Félix, en unos instantes de desconcierto, le diera la puntilla. El desenlace parecía ser el de otras tantas ocasiones, pero el VAR, en esta ocasión, fue ecuánime y pitó otro penalti a favor del Sevilla FC por derribo de Trippier a Ocampos en el área.



Ni por hache ni por el VAR consigue ganar el Sevilla FC en casa de los grandes. Lopetegui lo sabía, y por ello volvió a utilizar a Gudelj como un pivote híbrido que se incrustaba en defensa entre los centrales, configurando una línea de cinco atrás. Un arma de doble filo que dejaba espacios en el centro del campo para Joao Félix, quien se aprovechó de la ausencia en la zona ancha del lesionado Fernando. 

Sin Óliver, sancionado, Banega volvió a la sala de máquinas, pero demostró estar con la mente en otro sitio. Con el 2-2, Lopetegui metió a En-Nesyri por Suso y a Sergi Gómez por Jordán, jugando con una línea de cinco atrás fija y tres hombres de ataque arriba, mientras que Gudelj ya sólo era pivote. Para contrarrestar los arreones finales del Atlético, el vasco dio entrada al Mudo por un Ocampos más vertical, acabando con un 5-3-2 sobre el campo.