El delantero francotunecino
Wissam Ben Yedder deja el Sevilla tras tres temporadas en las que logró hacerse un hueco en la historia del centenario club como uno de sus grandes goleadores.
Ben Yedder, que cumplió el lunes de esta semana 29 años, llegó en la campaña 2016-17 procedente del Toulouse francés y desde el primer momento mantuvo un pulso con los grandes goleadores europeos.
En tres campañas se ha aupado, gracias a sus setenta tantos, al elenco de los
mejores goleadores históricos del Sevilla, que en su pasado mas reciente tiene a futbolistas como el malí
Frederic Kanouté, el brasileño
Luis Fabiano, el croata
Davor Suker o Álvaro Negredo, y más antiguos como
Juan Arza, Campanal, Araújo, Domenech o Acosta.
Ben Yedder, cuya facilidad ante los porteros le ha llevado a la selección francesa durante su etapa sevillista, cerró el pasado curso con
treinta goles, dieciocho en LaLiga, diez en la Liga Europa y dos en la Copa del Rey.
El ya jugador del Mónaco, que firmó también grandes números en las dos primeras campañas, tiene marcados varios tripletes en su trayectoria sevillista, dos de ellos en el pasado curso, uno al Levante como visitante y otro a la Real Sociedad como local.
En la anterior también había entrado en los registros con el triplete que hizo en la goleada al Maribor esloveno (3-0), el primero de un sevillista en la Champions.
Ya en su primer ejercicio hizo otros dos: uno en la Copa ante el modesto Formentera (9-1) y otro en LaLiga precisamente también ante la Real Sociedad, en esa ocasión en Anoeta (0-4).
Pero lo que más quedó marcado en el sevillismo fue un partido disputado en marzo de 2018, cuando Ben Yedder abrió las portadas de la prensa deportiva mundial y dio un gran paso hacia su reconocimiento.
Fue entonces el autor de los dos goles (1-2) que el Sevilla le hizo en Olf Trafford al Manchester United de José Mourinho, resultado que valió al conjunto hispalense para meterse en los cuartos de la Liga de Campeones.
El Sevilla escribió entonces otra página de su historia y con el menudo punta como protagonista, pues sesenta años después el equipo volvió a los cuartos del máximo torneo continental.
Ben Yedder, apartado de canon del delantero centro tradicional al no tener una gran corpulencia física
-170 centímetros de estatura y 68 kilos de peso-, además suele estar alejado del foco mediático y, pese a sus tres campañas en España, se va sin dominar bien el castellano.
Pero su falta de protagonismo fuera del campo lo traduce en rapidez, movilidad y definición ante las metas rivales, y ello ha hecho temible a este futbolista nacido en Sarcelles, cerca de París.
Llegó al Sevilla por unos nueve millones de euros desde el Toulouse para cubrir la repentina marcha de su compatriota
Kevin Gameiro al Atlético de Madrid.
Ahora se marcha otra vez a la liga francesa después de pagar el Mónaco los
cuarenta millones que tenía fijados en la cláusula de rescisión de un contrato que espiraba en junio de 2021.
En cualquier caso, la hinchada sevillista despide con respeto a un futbolista que entra en la historia del club por lo que se le contrató, marcar goles, y además sin hacer ruido fuera del campo y dejando llenas las arcas del club.