José Castro, presidente del Sevilla, ha comparecido hoy en rueda de prensa para mandar un mensaje claro a la afición:
los insultos en el Sánchez-Pizjuán deben acabar. "Es triste comparecer para hablar de un tema tan desagradable cuando el equipo marcha como un tiro pero sería irresponsable por mi parte mirar para otro lado. Todos tenemos que hacer un esfuerzo para que no haya más cánticos ofensivos de forma coral. Las reglas del juego han cambiado, nos gusten o no. Hay que aceptarlas. Los canticos de forma agrupada no nos llevan a ningún sitio, nos perjudican y generan una mala imagen. El equipo nos necesita en el
Sánchez-Pizjuán y no debemos darles armas a los rivales. odos los clubes deben ser iguales ante la ley, no vamos a permitir dobles raseros. El objetivo debe ser que no haya insultos, y así no habrá sanciones", ha comenzado el presidente.
"Quiero poner solución a ello y contar con todos los sevillistas, porque todos salimos perjudicados. Vamos a contactar con distintos grupos sevillistas para llegar a un acuerdo. stoy convencido que en esos sectores no todos insultan, pero todos sufrimos ese cierre. Nuestro departamento de seguridad estudia un protocolo para poner fin a esos insultos. Tendremos mucho ganado si lo conseguimos. El próximo partido en casa tenemos el pistoletazo de salida para lograrlo. Ningún cántico ofensivo más en nuestro estadio. El
Sevilla no se lo merece. cumulamos 28 expedientes, multas por valor de
300.000 euros que hemos logrado reducir a 120.000. Necesito del compromiso de todos para parar esto por el bien de nuestra entidad. Así solo perjudicamos a la entidad y a una maravillosa temporada. Tenemos que aceptarlo, pero estaremos vigilantes para otros estadios. Vamos a reunirnos con una serie de peñas y grupos de sevillistas. Estamos para escuchar a todo el mundo y buscar una solución. Queremos hablar con todos y parar esos cánticos corales", ha explicado
José Castro, que a continuación ha respondido a las preguntas de los medios.
Los partidos ante el Real Madrid: "La solicitud de cierre es a partir del Málaga. Lo del Sevilla-Real Madrid no está sancionado todavía, estamos hablando de que los insultos vienen de esa zona por lo general".
Preocupa el cierre parcial: "Hemos frenado el cierre otras veces, pero ya hay que poner pies en pared en esto. Aquí parece que tenemos más eternos rivales que en ningún sitio, y así no se puede seguir. La norma ha cambiado, no se puede insultar, y no hace falta para animar. Hemos pagado 120.000 euros en multas. Vamos a intentar que ese cierre no llegue porque vamos a exponer nuestros motivos y vamos a defendernos. Pero si siguen los insultos, nos lo acabarán cerrando".
Ocurre en otros estadios: "El Sevilla escucha y su presidente va a todos los partidos y también escucha insultos fuera de aquí. Tomamos nota y lo hemos dicho donde hay que decirlo. Los sevillistas no tienen que sentirse perseguidos porque aquí estamos para defenderlos".
El presidente, afectado: "No puedo estar más que triste. Si somos conscientes de lo que estamos haciendo, con una temporada ejemplar en lo deportivo, ilusionados con hacer algo importante, y lo que no quiero es darle arma a ningún rival y ni jugar fuera del Pizjuán. Esto es el Sevilla, y aquí jugamos al fútbol. Lo que no podemos es estropear esta temporada con una cosa que tiene arreglo".
También
José María Cruz tomó la palabra para aclarar que el mejor argumento para evitar el cierre es que no se vuelvan a producir esos insultos: "El buen éxito de las alegaciones y recursos va a depender de los argumentos jurídicos, que pueden ser aceptados o no, pero lo más decisivo va a ser el comportamiento futuro de ese sector de la afición en los próximos partidos. Si los cánticos continúan podemos salvarlo, pero seguirán llegando las mismas propuestas o más graves. Pero si utilizamos como hecho el que no se vuelva a producir, será muy positivo para que no se repita".