El entrenador del Sevilla,
Jorge Sampaoli, ha asegurado que su equipo va a "luchar por el título de Liga" hasta el final de temporada, tratando de jugar "de igual a igual contra cualquiera" y transmitiendo "felicidad a la gente de Sevilla", además de puntualizar que no le gustaron "los pitidos a Sergio Ramos" en el Sánchez-Pizjuán.
Tras la mejor primera vuelta de su historia, el Sevilla de
Jorge Sampaoli, segundo en la clasificación de
LaLiga Santander con 42 puntos, mantiene vivo el sueño de alcanzar al
Real Madrid y pelearle el campeonato liguero hasta el final. "Es una realidad que vamos a luchar por el título de Liga", ha reconocido Sampaoli en una entrevista en el programa de Onda Cero 'El Transistor'.
"Mi discurso es sencillo: jugar mano a mano atrás contra el oponente. Para mí transmitir y contagiar esto no ha sido tan difícil porque es lo que he hecho siempre. Tratamos de jugar de igual a igual contra cualquiera", indicó el técnico del conjunto hispalense, quien considera fundamental "transmitir felicidad a la gente de
Sevilla" y no al revés, para que el hincha "siga con la ilusión latente".
Sampaoli se hizo cargo del banquillo sevillista este mismo verano tras aceptar la propuesta del director deportivo del Sevilla,
Monchi, pese a reconocer haber estado "muy cerca del
Chelsea". Sin duda, una importante decisión en la que influyó en mayor medida las posibilidades profesionales que le brinda el Sevilla por encima del dinero, algo que para él "no es determinante".
Por otra parte, el preparador argentino valoró la rápida adaptación del conjunto de Nervión al estilo de juego que intenta proponer en cada encuentro. "El
Sevilla tiene un grupo de futbolistas que ha ganado la
Europa League con un estilo concreto, y ahora he llegado yo con un estilo contrario", subrayó.
Preguntado por la polémica con el futbolista del Real Madrid
Sergio Ramos y su relación con el
Sánchez-Pizjuán, Sampaoli se mostró contundente. "Los pitidos a Sergio Ramos no me gustaron. Seguramente que él esté orgulloso de haber nacido en este club; y los aficionados, también", comentó el exseleccionador chileno, que resta importancia a lo ocurrido más aún si es comparado con el fanatismo del "mundo futbolístico sudamericano".
Por último,
Sampaoli se declaró ferviente admirador de
Andrés Iniesta, del que lamenta que "no tenga un Balón de Oro", y de las ideas futbolísticas de su compatriota
Marcelo Bielsa, con quien apenas ha hablado "más que dos veces por teléfono". Aunque, sin duda, destaca a una figura futbolística por encima de los demás y al que espera conocer "pronto". "Maradona es para nosotros un dios del fútbol. Soñábamos con ir a verlo en vivo. Cambió el mundo del fútbol argentino", concluyó.