La noche del lunes fue muy dulce para la
UD Almería y todos sus aficionados.
El conjunto indálico daba un golpe sobre la mesa venciendo a un rival directo en la lucha por el ascenso directo a LaLiga Santander. Además, los pupilos de Rubi han aprovechado
el pinchazo de Eibar y de Valladolid para poner tierra de por medio con los pucelanos y arrimarse al liderato que ostenta ahora mismo el equipo vasco.
Todo lo contrario fue para los aficionados del Tenerife, que veían como su equipo perdía
una nueva oportunidad de engancharse al tren del ascenso directo. Hace dos semanas caían en su propio feudo contra el Valladolid tras una goleada que parecía dejarlos fuera de la lucha definitivamente. Esto no fue así ya que, después de su victoria en El Molinón, el Tenerife volvía a recortar puntos.
Los chicharreros podían dormir a un punto del ascenso y ahora están a siete puntos del Almería, equipo que marca esos puestos de promoción de manera directa a Primera División. El enfado fue grande y después del partido tanto el Tenerife, por la boca de Ramis, como su propia afición estalló en varias direcciones apuntando a dos figuras concretamente.
Ramazani fue duramente criticado tras mandar callar a la afición del Tenerife
El primero fue el colegiado De la Fuente Ramos. Su designación trajo mucha polémica,
pues es natural de Valladolid, ciudad de uno de los equipos más afectados por el resultado de anoche. Esto causó revuelo nada más conocerse la designación del Comité de Árbitros. Sin embargo,
el colegiado castellanoleonés supo digerir la presión y realizó una magnífica dirección de partido, dejando jugar en la medida de lo posible, algo que se ve muy poco en Segunda División. A pesar de esto,
los tinerfeños reclaman una inexistente falta de Rodrigo Ely sobre Aitor Sanz en el inicio de la jugada que terminó en penalti a Sadiq.
El otro señalado desde Tenerife no es ni más ni menos que el autor del gol que le dio la victoria a los unionistas.
Largie Ramazani fue objeto de duras críticas durante la noche del lunes debido a la celebración del penalti,
pues mandó a callar a la afición local después de los pitos previos en el lanzamiento de la pena máxima. Durante ese mismo momento,
varios energúmenos lanzaron botellas de agua al terreno de juego con el ánimo de impactar sobre el jugador del Almería. Lo peor llegó tras el partido, en las redes sociales. Los seguidores del Tenerife estallaron contra Ramazani lanzando todo tipo de improperios al belga después de su celebración: "
Lamentable gesto de Ramazani", "¡
Ya veremos lo que pasa a final de temporada!", "¡
Payaso!", "
Ojalá te rompas el cruzado"... son algunos de los muchos mensajes que sufrió por parte de la hinchada chicharrera.