Nunca ha ocultado sus colores. Ni siquiera tras su
abrupta salida en el verano de 2017 en dirección a Chamartín. Desde entonces, siempre ha luchado por limpiar su nombre. Ni siquiera está representado ya por la
agencia a la que muchos culpan de aquella 'fuga'. El caso es que Dani Ceballos ha dejado pasar el tiempo y, con los ánimos enfriados, aprovecha cualquier ocasión para
dejarse querer por el equipo que le hizo explotar como profesional.
Guiño tras guiño, el utrerano se deja querer en un buen momento de su carrera, no en pleno declive, que sería más fácil. Cedido hasta final de la 19/20 en el
Arsenal, el mediocentro sueña con un regreso a LaLiga, donde el Real Madrid prefiere que no esté cedido, para llegar mucho mejor preparado a la próxima
Eurocopa de 2021, su sueño. Sabe que para estar en las quinielas de Luis Enrique, admirador confeso de su fútbol, debe jugar los máximos minutos posibles donde sea
importante. Y lo sería en Heliópolis.
Cuestionado en la madrugada de este viernes en 'El Larguero' de la Cadena Ser por un hipotético regreso al Betis, volvió a ser claro: "
Es una opción. No cierro la puerta a jugar en ningún club. LaLiga me viene bien. Mi objetivo es jugar el año que viene y difícilmente en el
Real Madrid pueda jugar 40 partidos siendo importante. Este año he sido feliz jugando y el año que viene quiero hacer lo mismo".
Sin querer ahondar en su falta de feeling con
Zidane, Ceballos sabe que tendrá más opciones en otros destinos. Y, precisamente ahora, le interesa exprimirlas. "Estar en la Euro
es mi objetivo. Lo voy a dar todo y va a depender de mí. Si doy un gran nivel, estoy seguro de que voy a estar ahí y vamos a hacer una gran Eurocopa", finalizaba el centrocampista, por el que puja también el
Valencia.
El gran problema, como siempre,
es la carestía de la operación, pues al
sueldo de Dani (el más bajo de la plantilla madridista, pero sería del primer escalón bético) se une el deseo merengue de obtener réditos económicos por un nuevo préstamo. Seguro que, llegado el caso, el protagonista
presionaría un poco para completar el círculo y volver a sus orígenes, obteniendo la redención ansiada.
"La destitución de Rubi es mala suerte. Ahora está en buenas manos. El Betis está en sangre verde y blanca. Vi el derbi y el Sevilla fue muy superior y el resultado fue justo", admitió el utrerano, que también desveló que habló con Alexis y algunos jugadores del vestuario: "
Quedan Joaquín y Mandi. He hablado con Alexis porque es amigo mío y me dijo que estaban haciendo un Betis de cara al futuro".