Jugó en el Cádiz, le llamaban 'Mortadelo' y acabó disputando la Champions, la historia de Nenad Mirosavljevic

Militó dos temporadas en el submarino amarillo y fue pieza clave en el ascenso a Primera división

Jugó en el Cádiz, le llamaban 'Mortadelo' y acabó disputando la Champions, la historia de Nenad Mirosavljevic
Su apariencia física llevó a que fuera llamado 'Mortadelo' - Jesús Mejías
Jesús MejíasJesús Mejías 3 min lectura
En verano del año 2004 el Cádiz Club de Fútbol hacía oficial la incorporación de Nenad Mirosavljevic (1977), un delantero de 1,81 metros nacido en Pozega (Serbia) y que llegaba procedente del Smederevo de su país. La Tacita de plata se trataba de la primera experiencia del delantero en Europa occidental. Su apariencia física llevó a que fuera llamado ‘Mortadelo’ debido a su parecido con el personaje de cómics.

En su primera campaña en el Cádiz, la 2004-2005, demostró su valía para el cuadro de Víctor Espárrago. Jugó un total de 27 partidos aquel año y anotó cinco goles, tres de ellos en un encuentro ante el Real Valladolid y que acabaría finalmente en 6-1. El submarino amarillo lograría el ascenso a Primera división y Nenad Mirosavljevic formó parte de aquella plantilla que puso a la capital gaditana de nuevo en primera plana nacional. Compartió delantera en la máxima categoría con jugadores como Oli, Pavoni o el ‘Cacique’ Medina, pero aún así dejó buenos números ya que anotó cinco goles en 918 minutos, uno de ellos fue ante el FC Barcelona en el antiguo Carranza, una acción en la que el serbio con un sutil quiebro dejó sentado a Víctor Valdés.

Aquel año en Primera división, los medios de comunicación comenzaron a referirse a Mirosavljevic como ‘Mortadelo’ en un tono burlón, lo que llevó a que el club sacara un comunicado en el que señalaba que “creemos que resulta fachoso, grotesco y extravagante comparar a un profesional con una caricatura que en nada se asemeja a la personalidad y al carisma de nuestro jugador: una persona educada y correcta tanto dentro como fuera de los terrenos de juego”.

Su buen rendimiento en la liga española llevó a que el Partizán se interesara por él, por lo que Mirosavljevic puso rumbo a Belgrado, pero estuvo cedido en distintos clubes como el UD Vecindario, volvió al Smederevo y posteriormente al Apoel FC, club en el que llegaría a jugar la Champions League enfrentándose a clubes como el Atlético de Madrid y el Chelsea, a quien le marcó un gol en tierras londinenses.

Disputaría cinco partidos en la máxima categoría y anotó dos goles, mientras que en llegó a disputar seis encuentros de fase previa donde marcó otros tres goles. Disputó también la Copa de la Uefa y la Copa Intertoto.

En 2011 abandonaría la disciplina del conjunto de Chipre, pero seguiría un año más en aquel país, pero sus últimos pinitos en el mundo del fútbol los daría en el fútbol serbio hasta que se retiró en el año 2016, y aunque han pasado más de diez años desde que abandonara el Cádiz CF, la afición le sigue teniendo en alta estima y lo recuerda como un buen jugador.