Panenka fue ingresado hace una semana en la unidad de cuidados intensivos (UCI) de un hospital de Benesov, a 46 kilómetros de Praga, explicó la entidad.
Además de la COVID, Panenka sufrió una bronquitis aguda en ambos pulmones, pero tras dos días en la UCI logró estabilizarse y fue trasladado el pasado viernes a un hospital de la capital, donde estuvo en manos de su médico personal.
Ahí Panenka ha seguido necesitando "suministro de oxígeno" de forma mecánica. "El análisis de COVID por suerte ya ha dado negativo, y ahora sólo le incomoda la bronquitis", ha trasladado el hijo del futbolista, Tomas Panenka, que confirmó que proseguirá con un proceso de tratamiento domiciliario.
Panenka comenzó su carrera deportiva en el Bohemians en 1968 y disputó 678 partidos con el equipo verdiblanco hasta 1981, cuando fichó por el Rapid de Viena, el club en el que terminó su carrera en 1985.
Fue internacional con la selección de la extinta Checoslovaquia en 59 ocasiones, en las que marcó 12 goles. Panenka, conocido por su inconfundible bigote, se convirtió en una estrella cuando marcó un penalti de un golpeo suave y picado por el centro en la final de la Eurocopa de Yugoslavia de 1976.
Ese tanto le dio el título a su país en la final contra Alemania y a él un lugar en la historia del fútbol al bautizar uno de los lanzamientos desde los once metros más imitados y arriesgados.