El exinternacional portugués Paulo Futre confesó este miércoles que sintió "pánico" cuando le hicieron capitán del Atlético Madrid, entonces con sólo con 22 años y único portugués del vestuario. "Sentí pánico. Bajé al vestuario temblando", admitió Futre, recordando el día que Jesús Gil y Gil, el entonces presidente colchonero, le comunicó que iba a ser el nuevo capitán del equipo.
Futre contó esta experiencia durante su intervención en el congreso internacional "El futuro del fútbol" celebrado en Lisboa, durante un panel sobre liderazgo en el que también recordó cómo consiguió ganarse la confianza de sus compañeros. "Sólo sentí que había conquistado el vestuario cuando obligué a Gil y Gil a renovar con Carlos Aguilera", explicó. Aguilera era por entonces un prometedor joven al que le habían diagnosticado un tumor benigno en la tibia y, aunque Gil y Gil había prometido en un principio que le renovaría, el tiempo pasaba y el contrato no era firmado.
Al llegar el momento de renovar con Futre, el portugués exigió que primero se firmase la renovación de Aguilera para después avanzar con la suya. "Cuando entré después en el vestuario, fue la primera vez que vi respeto en los ojos de mis compañeros", aseguró.
Futre, 41 veces internacional con Portugal, jugó en la delantera del Atlético de Madrid en dos etapas, una entre 1987 y 1993 y otra en 1997, y tras retirarse también ejerció como director deportivo del club.