El italiano Elia Viviani (Deceuninck Quick Step), se ha impuesto por delante del colombiano Fernando Gaviria (Emirates) en la quinta etapa del Tour de los Emiratos disputada entre Sharjah-Flag Island y Khor Fakkan, de 181 kilómetros, en la que el esloveno Primoz Roglic (Jumbo Visma) conservó el jersey rojo, que defenderá ante Alejandro Valverde este viernes en la decisiva jornada de montaña en Jebel Jais.
Viviani, de 30 años, campeón olímpico de omnium, empató a uno en su duelo particular con Gaviria, segundo clasificado después de un esprint largo, disputado y resuelto por centímetros a favor del campeón de Italia, que alzó los brazos en un tiempo de 4h.49.59. La tercera plaza fue para el alemán Marcel Kittel (Katusha).
La etapa de transición dejó la general como estaba. Roglic aguantó de rojo, con Valverde a 21 segundos y el francés David Goudu (Groupama) a 38. Los grandes favoritos se citan en las alturas de Jebel Jais, en cuya cima se conocerá el nombre del vencedor final.
En una jornada cantada para el esprint faltó el viento huracanado y la molestia de la arena en la cara en la travesía del emirato de Sharjah, el tercero más grande de los Emiratos Árabes Unidos y el único que tiene territorio de lado a lado de la península arábiga, desde el Golfo Pérsico al de Omán.
Sharjah es el único emirato que prohíbe la venta de alcohol, aunque se acepta su consumo en casa, y tiene estrictas "leyes de decencia". Por ejemplo, mezclarse entre hombres y mujeres solteros es ilegal.
Con las leyes del ciclismo y en particular de los equipos modestos se fugaron los habituales Planet Y Kurianov, esta vez junto a Calabria, Vorobyev y Shilov. Gazprom y Novo Nordisk son sinónimo de escapada es este Tour, y también de ilusiones rotas, pues el pelotón aquí no regala nada. A 30 de meta ya estaban reintegrados entre la marabunta que volaba hacia la localidad costera de Khor Fakkan.
La pelea del esprint fue descarnada, sin cuartel. Emirates y Lotto Soudal libraron un pulso de lejos. A 6 de meta el ritmo era frenético y una caída acabó con las acciones del francés Sarreau. El alemán Sutterlin se ocupaba de Valverde, bien colocado fuera de incidentes.
A toda maquina forzó el Emirates con Kristoff, el australiano ganador en Hatta Caleb Ewan asomaba para el doblete, pero faltaba la ficha de Viviani, quien llegando desde atrás impuso la ley de la velocidad con su maillot tricolor.
Llega la hora de la verdad. Un ascenso de 23 kilómetros con final en la inédita meta de Jebel Jais a 1113 metros de altitud será última batalla de los favoritos por la general, que deberán quemar los últimos cartuchos por el jersey rojo.
Valverde lo tiene claro, y aunque respeta el potencial de Roglic, intentará repetir el triunfo del año pasado en la ronda de Abu Dabi.
"Mañana se decide la carrera, 21 segundos pueden ser muchos o pocos, batir a Roglic será difícil porque es un corredor muy fuerte. Vamos a ver qué se puede hacer, si no es posible ganar el Tour buscaré al menos la etapa. Una pena que ayer con la caída perdiera unos segundos preciosos", dijo el "Bala".
Valverde explicó que la subida no es especialmente dura, pero advirtió de los efectos que puede tener el siempre temido viento. "Conozco la subida de Jebel Jais, es muy larga, de 23 kilómetros, pero no es dura, la he echo entrenando. Es diferente a la de Hatta, que es más explosiva. Creo que puede influir mucho el viento, ya que siempre provoca tensión y desgasta mucho. No sé si voy a atacar o no, pero intentaré ganar, como siempre".
La cita está marcada. Jebel Jais conocerá la foto final del podio del Tour de los Emiratos, la única prueba del World Tour en Oriente Medio, como dicen con orgullo por estas tierras.