Espectáculo sobre espectáculo. Dinero sobre dinero. En la Fórmula Uno que se avecina primaran en dinero y el espectáculo, abriendo una honda expansiva que sobrepasará Europa, donde la F1 se ha centrado en la última década. En Oriente Medio hay países llamando a la puerta de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) para organizar una carrera, dispuestos a soltar hasta 100 millones de euros. Un canon “alocado y salvaje de esta nueva F1”, como apunta Marca, que busca espacios que sean capaces de acoger show, negocios, ricos y carreras. Estas ciudades se unirán, a golpe de talonario, a los clásicos Silverstone, Spa o Monza, para aumentar el calendario hasta las 30 carreras.
“El error era claro antes: hay que ir a gente que no conozca la Fórmula Uno, ofrecer un entretenimiento, no ir directos al mercado que ya hay. El mundo nos obliga ahora a hacer cosas diferentes. La competición ayuda a buscar nuevas formas de financiación. El reto del futuro es ese. Ahora, hay que tener una cultura del entretenimiento muy fuerte", dice Stefano Domenicali, CEO de la F1.
La ampliación del calendario, con un mes más de carreras (casi dos), obligará a aumentar las plantillas de los equipos para poder gozar de descansos y vacaciones, y además de todo esto, las escuderías tendrán que incorporar un tercer coche pilotado por una mujer. Entre 2023 y 2025 arrancará este proyecto cuyo siguiente paso es otro coche extra obligatorio en la F3 para los cinco mejores equipos que tendrán obligación de poner una mujer en él, así como otro en F2 en 2026. Y en F1, pues justo después.
Junto a ello, la F1 del futuro también acelera hacia un futuro más sostenible, contra el cambio climático. La Formula One Management (FOM) trabaja junto a escudería como Ferrari en diferentes soluciones para desarrollar los avances tecnológicos punteros que impulsen la lucha contra el cambio climático para alcanzar un modelo sostenible basado en la NetZero. Los avances son continuos y los planes de sostenibilidad para el futuro pasan por la introducción de una nueva generación de motores más eficientes y menos complejos (igualmente híbridos) en el 2025 y el uso de combustibles cien por cien sostenibles antes del 2030.