Alvaro Arenillas5 min lecturaUna de las grandes novedades de la temporada 2024 de MotoGP es que tendremos en parrilla a Pedro Acosta, un español de tan solo 19 años que llega tras proclamarse campeón del mundo en Moto2 y teniendo además en el bolsillo el título de 2021 en Moto3. Su fama le precede y en KTM están realmente contentos de contar con él; tanto es así que no esconden lo mucho que les ha sorprendido su madurez y sus conocimientos técnicos.
La primera toma de contacto con la moto del equipo Tech3 GasGas llegó en los test del GP de Valencia. Allí realizó 70 giros sobre la RC16 para quedarse a sólo 1.2 segundos del mejor registro y a unas cuatro décimas de su compañero de equipo, Augusto Fernández.
Pese a tan buen comienzo, el joven español no tiene reparos en admitir que pese a estar contento con esa primera toma de contacto, aún no puede sentirse a la altura de sus adversarios, ya que antes debe solucionar una dificultad a la que todos se han enfrentado antes que él: acomodarse a la montura de MotoGP.
"Estaba súper contento por cómo fue aquel día, por cómo estaba la gente a mi alrededor y el equipo, porque seguro que KTM lo cambió todo, desde lo más pequeño a lo más grande, para ayudarme a estar contento alrededor del equipo, a estar cómodo. Me han puesto con Paul Trevathan, que estuvo con Pol Espargaró en los inicios de KTM, y sabe exactamente cómo es la moto. Estoy muy contento de tenerle a mi lado, por cómo está trabajando en KTM. Fue un buen día, pero de momento no me puedo sentir un piloto de MotoGP, porque sólo ha sido un día y tengo mucho que aprender", comenta en una entrevista concedida a Motorsport.com.
De su primer día como piloto de KTM destaca lo mucho que mueve la categoría reina del motociclismo, tanto en aficionados como en personal trabajando en la misma. "KTM está poniéndolo todo y más. Cada vez que salía a pista, tenía como 20 o 30 personas a mi alrededor, ¡era una locura!", sentencia.
Pedro Acosta ya está donde tanto deseaba y hasta cierto punto está relajado, pero echando la vista atrás recalca que lo que ahora ve como diversión y pasión por conducir la moto, antes era una presión que no desea a nadie y que, en parte, llegó por 'culpa' de Marc Márquez.
"Sobre la presión, imagínate cuando tenía 16 años: Tenía una cámara 24 horas detrás de mí. Y escuchaba cosas como 'eres el próximo Marc Márquez, estás haciendo historia, estás batiendo récords, nunca se ve algo así, vas a saltar directamente a MotoGP...' No es fácil de llevar. Yo sólo quería ser un chico normal. Eso era presión. Ahora es como un juego. La gente puede hablar y puede pensar lo que quiera, pero ahora no pienso en lo que dice la gente", sentencia.
Aunque está por ver el rendimiento que acabe dando sobre la moto, en Tech3 tienen claro que se han hecho con uno de los grandes talentos del motociclismo, y ya no sólo por su pilotaje, sino porque ha demostrado tener los pies en el suelo pese a la emoción de haber alcanzado el sueño de ser piloto de MotoGP. Así lo expresa Hervé Poncharal, máximo responsable del equipo.
"Hay que decir que todos los pilotos españoles que pasan por Aki Ajo tienen una forma de trabajar muy específica. Están bien entrenados, saben cómo hacerlo. Saben que tienen que trabajar con el equipo. Pedro es muy maduro, sabe todo esto y tiene un conocimiento técnico bastante alto. Conoce muchas motos y creo que lo tiene todo para hacer un buen trabajo. Es pronto, así que también es difícil hablar de él, pero está claro que nos han impresionado sus primeras vueltas, su tranquilidad y su conocimiento de la moto", sentencia.