Han sido varios los meses que Max Verstappen ha tenido que soportar las críticas de los expertos de la Fórmula 1 y las sanciones de la FIA. Y tras volver a ganar un Gran Premio, algo que no hacía desde el certamen español, el piloto neerlandés se acordó de todos aquellos detractores que le han perseguido semanas atrás buscándole las cosquillas.
Y es que con su remontada en Interlagos, desde la 17ª posición a la 1ª, ha dejado ya el Mundial de pilotos visto para sentencia. Y, sobre todo, viendo que Lando Norris no ha sabido soportar la presión.
Así, en la rueda de prensa, interrumpió a todos los que le estaban elogiando para lanzar una pregunta a los periodistas allí presentes: "Tengo una pregunta rápida. Quiero decir, agradezco que todos estén aquí, pero no veo a nadie de la prensa británica. ¿Tuvieron que irse corriendo al aeropuerto? ¿O no saben dónde está la sala de prensa?".
Sonaron algunos aplausos y los pilotos de Alpine, Ocon y Gasly no pudieron evitar reírse: "¡Esa es una buena pregunta! Esa es una buena pregunta", respondió este último.
El triple campeón del mundo olió la sangre en Brasil y no desaprovechó la oportunidad. En la primera vuelta ya había adelantado a siete pilotos y su misiva a Norris fue clara sobre el trazado. Ni él mismo pensó que podría llegar tan lejos en Sao Paulo con tantos condicionantes en contra.
"Ha sido mi mejor carrera hasta la fecha y es una victoria crucial para lograr mi cuarto título. Fue increíblemente importante porque, de cierta forma, estaba esperando perder puntos hoy", subrayó el de Red Bull.
En este sentido, recalcó dónde estuvo la clave de su triunfo: "El buen inicio y el estar concentrado en no cometer errores durante toda la carrera ha sido decisivo". Asimismo, declaró sentirse "cómodo" con la pista mojada, al tiempo que reconoció que en ciertos momentos era "imposible de conducir" y bromeó que era más adecuada para circular en moto acuática.Para los tres próximos Grandes Premios, Max dejó sobre la mesa un deseo: "Ahora solo quiero carreras limpias".
Tras diez carreras sin ganar y viendo cómo Lando Norris y los McLaren les superaban una y otra vez en la pista, Verstappen demostró una vez más que está hecho de otra pasta. Eso sí, también le lanzó un mensaje a su equipo para que no se relajen: "Confío en que para las tres últimas carreras podamos luchar otra vez y ser más competitivos".
Ahora, tras la victoria en Sao Paulo, Verstappen lidera el Mundial con 393 puntos y amplía su ventaja con su rival más próximo, el británico Lando Norris (McLaren), con 331 puntos.