Aparte de los rumores del posible fichaje de Fernando Alonso por Red Bull y de los piropos que tanto Adrian Newey como el piloto asturiano se tiraron recientemente, en las últimas semanas ha habido un caso más controvertido en la Fórmula 1 y que, al contrario que con el español, sí ha tenido recorrido. Se trata de los contactos de Lewis Hamilton con la escudería energética para saber si habría la posibilidad de fichar en un futuro próximo.
Todo tuvo lugar en los días previos al último gran premio de la temporada y dio lugar a un intercambio de palabras en los medios que, sobre todo, dejaron en evidencia al piloto inglés. Y a un Mercedes que, pese a la rectificación de Lewis, quedó retratado.
Primero fue Horner el que desveló el acercamiento, Hamilton el que lo negó en la rueda de prensa previa al GP de Abu Dhabi, de nuevo el jefe del equipo Red Bull el que ratificó cómo había sido y, ahora, Marko, en unas palabras que recoge Motorsport.com, el que amplía lo señalado.
“Hemos tenido varias conversaciones durante los años con Lewis para que se uniera. La más reciente, al inicio de esta temporada, que hubo una pregunta sobre si nos interesaría. Fue alrededor de Mónaco, en mayo. También se reunió con John Elkann -presidente de Ferrari- y fueron conversaciones serias, no sé si con Vasseur”, indicaba Horner en una entrevista con Daily Mail que desató la tempestad. No sólo señalaba que Hamilton se había ofrecido a Red Bull, sino también a Ferrari antes de renovar con Mercedes hasta 2026 tras encontrar sendas respuestas negativas.
Hamilton no dudó en negarlo rotundamente. Fue en una conferencia pública ante todos los medios y, aunque no quiso llamar mentiroso al austriaco, sí señaló que no sabía de qué estaba hablando. “Lo he revisado con todos los miembros de mi equipo y nadie ha hablado con él. (...) Tenía cientos de mensajes, uno de Christian -Horner, en un teléfono antiguo- diciendo de hablar al final de la temporada, le respondí que lo había visto tarde. A mucha gente le gusta lanzar mi nombre, para recibir atención, sobre todo si estás solo o nadie te hace mucho caso. No hubo conversaciones confidenciales, pero ya conoces a Christian, le encantan este tipo de cosas”, lanzaba el piloto británico.
Hamilton iba más allá y aseguraba que había renovado porque le gustan los retos, no ganar fácil. “Ir de un coche que no es fantástico a otro ganador, desde mi perspectiva, no es un sueño. El sueño es empezar desde donde estamos, construir algo y ganar. Por eso me quedé en Mercedes”, añadía.
Christian Horner, lejos de achantarse, respondió también ese fin de semana en la rueda de prensa de jefes de equipo. "Es extraordinario lo grande que se ha convertido esta historia, cortesía de Daily Mail, que ha sido bastante franco con este tema... Ahora es sobre todo una cuestión de 'él dijo esto y el otro dijo aquello'. Pero es completamente normal que los pilotos, los representantes de los pilotos o los padres de los pilotos tengan diferentes conversaciones durante una temporada. No tuvimos conversaciones serias porque no teníamos un asiento disponible. Pero conozco a Anthony Hamilton desde hace muchos años, es un buen hombre y un orgulloso padre de piloto", empezaba diciendo el jefe de Red Bull, quien añadió, de forma irónica, que tal vez el acercamiento del padre de Lewis Hamilton era para él mismo.
"Nunca se sabe exactamente quién representa a quién, pero si tienen los mismos apellidos, se podría pensar que estarían bastante cerca... Pero aparte de intercambiar algunas cortesías, no han preguntado específicamente '¿puedo conducir para Red Bull el año que viene?' ¡A no ser que al propio Anthony le gustaría conducir para Red Bull!", comenta Horner de broma.
La puntilla la ponía ahora Helmut Marko, asesor de Red Bull, quien confirmaba las palabras del propio Horner y admitía haber mantenido una conversación al respecto sobre Hamilton. "Christian me informó y me mostró el mensaje de texto que recibió, pero yo le dije: 'Hamilton y Max -Verstappen-, eso no funcionaría'. Hubo demasiada acción y, en 2021, hubo tensión. Por otro lado, no podemos permitirnos tener a los dos pilotos más caros de la parrilla en el mismo equipo. Simplemente, nunca va a pasar. Así que le dije a Christian: '¡De ninguna manera!'", señala.
Dos fuentes que dejan en mal lugar a un Lewis Hamilton que ya en su día 'traicionó' a McLaren cuando éste bajó su rendimiento para fichar por el que se preveía que sería la escudería dominante en los años siguientes, Mercedes, y que ahora habrá visto algo similar para preferir antes Red Bull o Ferrari que ésta.