Alvaro Arenillas3 min lecturaSe esperaba mucho de Fernando Alonso en el Gran Premio de Las Vegas del Mundial de Fórmula 1. Pese a que se daba casi por hecho que luchar por la victoria 33 sería prácticamente imposible, el hecho de tratarse de un circuito nuevo y de que todos partiesen de cero en el conocimiento del mismo, hacía pensar que el piloto asturiano podría sacar un plus que le llevase a pelear al menos por el podio. Sin embargo, no contaba con que su Aston Martin desvelaría un inesperado problema durante la clasificación, en la cual ha terminado décimo, aunque saldrá noveno por la sanción que la FIA ha impuesto a Carlos Sainz.
Así es. Mientras otros coches literalmente volaban sobre la pista, la escudería británica se ha pasado toda la clasificación sufriendo por su bajísima velocidad punta; tanto es así que el dos veces campeón del mundo ha marcado la tercera marca más baja del sábado con 343 kilómetros por hora, nueve por debajo de los dos monoplazas más rápidos, el Alpine de Esteban Ocon y el Alfa Romeo de Guanyu Zhou.
Si no ser muy rápido ya es un problema en un circuito de alta velocidad en el que las larguísimas rectas son esenciales, esto pasa a ser un verdadero problemón cuando en las frenadas del trazado tampoco se puede sacar ventaja a los rivales, y es que en Aston Martin no parecen haber encontrado el equilibrio necesario para poder estar en la pelea con los mejores en Las Vegas.
Pese a tales circunstancias, Alonso no se muestra contrariado por lo ocurrido en la Q3, sino que cree que dadas las circunstancias y el nivel de los coches rivales, hicieron todo lo que estaba en sus manos. "Estoy muy satisfecho. Ha sido una clasificación muy buena. Hemos optimizado todas las vueltas. No había mucho más. Nos suele pasar en circuitos nuevos, cuando más oportunidades y neumáticos das al resto, todo se iguala. Si fuese un ‘sprint’ tendría muchas más opciones de destacar un poco más, pero cuando tienes cinco o seis intentos en clasificación ya todo el mundo va al cien por cien en la Q3 y llega la realidad de cada coche", analiza en los micrófonos en DAZN antes de dejar claro que no será un domingo sencillo.
"Carlos Sainz, Hamilton, Checo… Tengo malos clientes detrás. Los Ferrari están en otra liga aquí y no creo que sea mucha oposición para Carlos mañana. A ver si podemos luchar con Hamilton y Checo", setencia.