Fernando Alonso vuelve este fin de semana a competir en Las Vegas, en el polémico Gran Premio que lleva recibiendo críticas casi desde su anuncio y en el que espera que su Aston Martin pueda reiterar el buen rendimiento y las sensaciones que le permitieron hacer podio en Brasil.
El tercer puesto en Interlagos le ha permitido, por ahora, mantenerse en la cuarta plaza del Mundial de Pilotos y aventajar de nuevo a Carlos Sainz, pero ya tiene a Lando Norris a sólo tres puntos. El piloto asturiano querrá seguir sumando en Las Vegas y acabar la temporada, para la que sólo quedaría la carrera de Yas Marina, con las mejores sensaciones.
Y también con el mayor número de puntos posible, aunque ya sabe que eso tiene un precio de cara al próximo año. La revista Auto Bild ha hecho público lo que cada piloto debe pagar para poder competir la siguiente temporada en el gran circo de la Fórmula 1. Las cifras son muy altas para cualquier persona, escandalosas en el caso de que seas de los pilotos o las escuderías punteras, aunque también bajas si las comparamos con lo que, a priori, cobran estos deportistas y el dinero que se mueve en este mundo.
En este sentido, todos los pilotos deben pagar un fijo de 10.400 euros por competir y, a eso, añadir 2.100 euros adicionales por cada punto sumado. Los 198 puntos que Fernando Alonso suma en este momento se transformarían en 415.800 euros a pagar, lo que sumado al fijo nos llevaría a una cifra de 426.200 euros. Eso tendría que abonar el piloto asturiano para obtener la Superlicencia y poder competir en F1.
Lógicamente, con el Mundial que Max Verstappen está realizando tras lograr 17 victorias y sumar 534 puntos esta temporada, sus dividendos se disparan por encima del millón de euros (1.110.800 euros). En realidad, estas cifras serán mayores, ya que son las que deben pagar los pilotos en función de los precios que la FIA ha puesto este año, pero para el próximo hay prevista una subida de un 7 %.
No sólo los pilotos deben pagar por competir si son los mejores, también las escuderías están obligadas a pasar por caja en función de sus puntos. En su caso, el fijo es de 585.668 euros y 5.854 euros por cada punto que consigan en el Mundial de Constructores. Red Bull, con el dominio de sus pilotos y sus 782 puntos, ya acumula la obligación de pagar 4,5 millones de euros para la próxima temporada. Y, seguramente, no le importará que sean unos pocos más.