Max Verstappen sigue manteniendo su ventaja en el mundial de Fórmula 1, toda vez que en la primera parte de la temporada amasó una puntuación más que considerable que le permite soñar con su cuarto cetro consecutivo, pero en las últimas carreras ha visto como, de golpe y porrazo, su Red Bull ya no es el coche con un dominio abusivo que era, y por el contrario, hay algunos por delante. Desde que McLaren llegó a Miami con unas mejoras que les iban a permitir ganar varias carreras y sobre todo, ser consistentemente más rápidos semana a semana, al neerlandés solo le han salvado ciertas exhibiciones o errores de sus rivales. Sigue siendo líder, pero cada carrera es un suplicio, y en Hungría fue la que peor se le vio, desquiciado, hasta que acabó accidentado con Hamilton, quien parece seguir molesto.
Hay que remontarse a la mitad de la carrera en Hungaroring, cuando Max luchaba por ponerse tercero, posición que ocupaba el siete veces campeón del mundo. Por errores de estrategia de Red Bull había caído hasta la cuarta plaza y quería remontar, pero se pasó de vueltas. En un intento de adelantamiento entró 'a lo loco', y tocó a Lewis, que pudo seguir en pista, pero él sin embargo se salió, y aunque regresó, ahí se quedaron sus opciones de podio. Al inglés no le gustó su actitud, ni en la pista, ni el radio ni en los mircrófonos, y se lo ha recriminado públicamente.
El inglés recordó en la previa del GP de Bélgica, que se disputa este fin de semana en Spa, que Verstappen no se comportó como un campeón, y que tiene que mejorar en muchos aspectos si quiere ser respetado como lo que es, un gran piloto, perfectamente de los mejores de siempre. "Quizá un líder así debe recordar que es un compañero de equipo para mucha gente. Tiene que actuar como un campeón del mundo".
En cambio el líder tiene otro punto de vista, y es que para él es importante poder ser crítico, y no le gusta la gente que no es capaz de tolerar lo que se dice de ellos. "En este mundo en el que vivimos ahora siento que mucha gente que ya no puede soportar las críticas como solía hacer y no quiero terminar así".
De hecho, el de Hessalt cree que todas sus respuestas fueron lógicas, dentro del cotexto en el que sucedieron. "Cuando las cosas no van como deberían, creo que es bastante normal que puedas compartir tu frustración". Aunque en cierta manera reculó, dejando ver que tampoco había actuado del todo bien, y que esas cosas se hablan en las reuniones del equipo posteriores a la carrera.