Antonio José Medina3 min lectura"Como dijo Fred (Vasseur), ha habido conversaciones. Quiero empezar 2024 sabiendo donde voy a correr en 2025 y mi prioridad es renovar con Ferrari y seguir muchos años más. Quiero renovar al menos dos años con Ferrari. Las dos partes estamos contentas. Tenemos tres meses para llegar a ese acuerdo antes de la primera carrera", señalaba Carlos Sainz el pasado 19 de diciembre en un acto celebrado en Madrid con uno de sus patrocinadores.
Era la contestación a unas palabras dichas dos días antes por el Team Principal de Ferrari, Frédéric Vasseur, quien pese a que dijo que no tenía urgencia porque sus dos pilotos tenían contrato este año y tendría meses para negociar, también indicaba que "el objetivo" es tenerlo todo acordado antes de que el Mundial de Fórmula 1 comenzase en marzo. “Si tengo a los dos pilotos adecuados para 2024, los tengo para 2025, 2026 y 2027”, advertía el francés.
Todo apunta a un acuerdo que, incluso, podría ser por más de los dos años que en un principio se anunciaban y tener a Carlos Sainz en la 'scuderia' hasta 2028, el tiempo por el que pretenden renovar también a Charles Leclerc.
Sin embargo, pese a esta versión 'oficial' no han parado de salir alternativas en las últimas semanas que han generado dudas sobre la continuidad del piloto madrileño en Ferrari y la última la ha provocado la misma web oficial de la Fórmula 1. Según ésta, la prioridad de la escudería italiana es renovar a Leclerc, algo lógico cuando en un principio le ofrecían más años que a Carlos Sainz.
Y, aunque también quieren renovar a Carlos Sainz, tienen encima de la mesa una alternativa en el caso de que no se llegue a un acuerdo. Esa sería la de Alex Albon, actual piloto de Williams y excompañero de Max Verstappen de Red Bull.
El anglo-tailandés llegó por George Russell en 2022 a la histórica escudería británica y firmó un contrato multianual tras una buena temporada, pero su intención es buscar un equipo con más aspiraciones para 2025, de ahí que tenga esa puerta abierta. Puede ser sólo una medida de presión para que Carlos Sainz acepte la oferta que Ferrari le ha hecho, pero como poco parece curiosa su procedencia, ya que la F1 no suele implicarse en nada que tenga que ver con los 'rumores' del 'paddock' ni las negociaciones de los equipos.