Alberto Gálvez4 min lecturaMucho se ha hablado de Carlos Sainz esta temporada en la Fórmula 1. Para bien y para mal. Por suerte, en la memoria de todos va a quedar su recta final con Ferrari, sobresaliente en actitud y notable alto en cuanto a resultados se refiere.
Y es que el madrileño ha tenido que luchar con un fuerte golpe psicológico al inicio del curso, el que le asestó su propio equipo comunicándole que sería su última temporada en el equipo italiano, que su lugar sería ocupado por Lewis Hamilton.
Fue ahí donde tuvo que sacar su carácter a relucir y, con el apoyo de los suyos, empezó a demostrarle a sus jefes que la decisión podría no haberles salido del todo bien. Lejos de venirse abajo, ha terminado por delante del británico en la clasificación de pilotos y, gracias a sus puntos, Ferrari ha podido luchar por el Mundial de Constructores hasta el último minuto.
Pero la experiencia de Carlos le ha hecho sobreponerse a todos los factores que ha tenido en contra esta temporada. O, al menos, eso reconoce en The Operator, el nuevo documental de DAZN: “Llevamos diez años expuestos a la presión de la F1, cuatro años expuestos a la de Ferrari, que es otro paso, y aquí al final o te adaptas y eres resiliente o no sobrevives. Tienes que ser fuerte mentalmente, porque aquí en la Formula 1 de los veinte que somos no hay nadie flojo, somos todos bastante duros a ese nivel”.
Cabe recordar que, durante esta última campaña, Sainz fue operado de apendicitis y justo después llegó su primera victoria en el GP de Australia. Su otro gran éxito no llegaría hasta el certamen de México, imponiéndose a todo un Verstappen que luchaba por su cuarto título consecutivo: “Cada año en Formula 1 es un año para dar un golpe encima de la mesa. En este deporte te comen y tienes que estar constantemente dando golpes encima de la mesa si te quieres mantener y quieres mantener tu estatus y posición”, afirma en el reportaje el piloto español.
Y, cómo no, su salida de Ferrari y su llegada a Williams ha sido incomprendida para muchos, como para su amigo Lando Norris: “Ya ha demostrado suficiente en la F1. Merece luchar por campeonatos, por victorias… Es una pena cuando esa oportunidad se pierde, pero no es porque no tenga talento o habilidad, sino porque el mayor nombre en la Formula 1 ha querido su asiento”.
Y tras despedirle con homenaje incluido, en Ferrari no han dudado en redactarle la mejor carta de recomendación posible. Marc Gené, uno de los hombres fuertes de la escudería italiana, lo deja claro: “Es un auténtico lujo trabajar con él, técnicamente es muy bueno. En situaciones con agua, pista húmeda, condiciones cambiables, es extremadamente bueno. Es extremadamente completo y no siempre se le ha hecho justicia. Es un pilotazo, potencial campeón del mundo”.
Por último, Fred Vasseur, team manager del conjunto de Maranello, se ha encargado de desmentir cualquier pique o encontronazo con su ya excompañero Charles Leclerc, un rumor que hizo que muchos viesen en ello un posible motivo para su salida: "Pasó por momentos complicados, pero nunca hubo ningún toque. Ha sido una competencia sana y lo mejor para nosotros. Porque de esa competitividad hemos conseguido buenos resultados para el equipo”.