Alpine reconoce que 'boicoteó' a Alonso

La imagen de los mecánicos de Alpine empujando el monoplaza de Fernando Alonso camino de los garajes se convirtió en algo habitual durante la temporada de Fórmula Uno que acaba de terminar. En 22 grandes premios, el asturiano abandonó en seis ocasiones, lo que convirtió el final de su etapa en la escudería francesa en toda una tortura. A las averías se sumaron los rifirrafes con Esteban Ocon, su compañero de filas.

Ahora, una vez que ha finalizado la competición, y mientras preparan las novedades para la nueva campaña, los ingenieros y los mecánicos de Alpine aseguran que han encontrado los motivos de los continuos fallos del curso pasado, que ya parecían un ‘boicot’ contra el propio Alonso.

Con los errores localizados, desde Alpine esperan que en 2023 las carreras sean más tranquilas para Ocon y Pierre Gasly, que tendrán a Alonso como rival en Aston Martin. El encargado de hablar abiertamente sobre los problemas que condenaron y desesperaron a Alonso la temporada pasada ha sido Bruno Famin, director ejecutivo de Alpine y parte del equipo Renault con el que Alonso ganó los Mundiales de 2005 y 2006. “Tuvimos problemas con las piezas de los proveedores. Pero eso no importa. Tenemos la responsabilidad de revisar todo y asegurarnos de que el motor esté estable”, comentó en 'Auto motor and sport'.

Famin también aludió a los cambios de reglamento para 2022, donde Alpine asumió “muchos riesgos”, intentando que el “motor fuera lo más ligero posible”. Todas esas innovaciones no se midieron en el banco de pruebas, algo que cambiará durante el nuevo curso, tras el estreno de un Virtual Test Track.

Las averías que han ‘boicoteado’ la temporada de Alonso se han centrado sobre todo en las bombas de agua y gasolina, ligadas a las bombas de propulsión y mejoradas para 2023. A pesar de entonar una clara autocrítica, Famin destacó una de las bondades del A110R, como la aerodinámica.

Además de los problemas técnicos, el ex de Renault habló de problemas logísticos, ya que sus fábricas están separadas: en Enstone hacen el chasis y en Viry, el motor. “No se trata del rendimiento aerodinámico por un lado y el rendimiento del motor por el otro. Sólo pensamos en el rendimiento general del coche”, finalizó.