Francisco Salas4 min lecturaNo tiene el golf en los Juegos Olímpicos una historia muy extensa, y menos aún para el deporte español, ya que es uno de los deportes del programa actual en los que la delegación española no ha podido sumar una medalla jamás. En Tokio había muchas esperanzas en que Jon Rahm lo lograra, porque venía siendo uno de los mejores del mundo, y las expectativas estaban altas, sin embargo, la mala suerte llamó a su puerta y dio positivo en Covid. Sin embargo, este 2024 parecía lejos de este nivel, hasta que esta semana ha dado un salto en el British Open, y ahora llega con opciones de todo a la cita parisina, y lo mejor, que no lo esconde.
"Si todo transcurre con normalidad, tendré opciones de ganar una medalla", así de claro ha sido el de Barrika en declaraciones previas a la competición que comienza el día 1 en el Golf National francés. Este campo, sede del Abierto de Francia lo conoce bien Rahm, ya que tuvo la oportunidad de ganar allí pero un doble en el hoyo 12 se lo impidió. Además, también disputó la Ryder Cup de 2018 que ganó Europa pero no jugó muy bien, aunque eso sí, conoce muy bien el terreno. "Es un campo exigente, donde hay que hacerlo todo bien de tee a green, un campo que le va a mi juego, del que no te puedes esconder de ninguna manera".
La posibilidad de jugar para su país le llega tras perderse Tokio 2020 por dar positivo en covid, un momento "muy duro" en su carrera, porque ahí estaba jugando muy bien y sabía que tenía opciones de medalla, pero precisamente por eso esta vez este año con la motivación por las nubes. "Voy con motivación extra, con ganas de saber que perdí una oportunidad y siendo consciente de que quién sabe cuántas más voy a tener".
Para Rahm ser olímpico y representar a su país "es el honor más alto que puede tener cualquier deportista". "Poder ser parte de ello, después de la mala suerte de Tokio me hace mucha ilusión y ojalá pueda ser parte del medallero español". No es la primera vez que lo hace, puesto que ha tenido "la suerte" de hacerlo como amateur y ahora espera hacerlo como profesional.
Eso sí, hay dos cosas que echa de menos, una de ellas es no estar tan lejos de París y de la Villa Olímpica; y la otra es que le gustaría que "hubiese una opción de competir algo por equipos, como en el tenis", algo que le permitiría jugar con David Puig, alguien que tiene una trayectoria parecida a la suya "No hemos jugado juntos muchas veces, pero tenemos trayectorias similares, primero en España, en los equipos nacionales, luego en la universidad de Arizona State en Estados Unidos. Me hace mucha ilusión que se haya clasificado y poder compartirlo con él".