Alvaro Arenillas3 min lecturaYunus Musah ha alzado la voz. El internacional por Estados Unidos lleva casi un mes esperando que se desbloquee su situación en el Valencia CF y se le empieza a agotar la paciencia; tanto es así que ha expresado en primer persona al club que quiere abandonar su disciplina y que solo se conformará con ir al destino que ha elegido; informa Matteo Moretto de Relevo.
Lo cierto es que la relación entre las partes se va enturbiando por momentos. Mientras el joven jugador estaba de vacaciones todo era calma y paciencia, pero ahora, con la pretemporada empezada y estando la plantilla inmersa en los primeros días de concentración en Suiza, todo se ha complicado. El futbolista con pasaporte italiano no se está entrenando con sus compañeros por un supuesto problema en la pierna, pero sí ha tenido tiempo para comunicar que su cabeza está puerta únicamente en marcharse, y no a cualquier lugar.
Según señala el citado medio, el jugador de 22 años ha dejado las cosas claras al Valencia, y es que no solo les ha reiterado que se quiere ir, sino que solo aceptará un traspaso que le haga incorporarse al AC Milan, club que lleva semanas negociando con los del Turia sin alcanzar un entendimiento; y lo peor es que no parece que este se vea cercano.
Aunque es obvio que los Che necesitan ingresar dinero para completar su plantilla –tienen 21 futbolistas y unos cuantos apuntan a salir–, Peter Lim se ha enrocado pidiendo 25 millones de euros y no parece dispuesto a ceder. Los rossoneri por su parte no tienen intención de llegar a los 20 kilos sumando la parte fija y las variables que se incluyan. ¿Hay solución? Lo desconocemos.
Musah, quien llegó libre procedente del Arsenal en 2019, tiene su mente fuera del proyecto valencianista y Rubén Baraja directamente no cuenta con él; sin embargo, tal circunstancia no hace que los directivos de la escuadra de la comunidad valenciana parezcan dispuestos a dar su brazo a torcer.
A estas alturas el mayor peligro para ambos es que todo se rompa. La situación financiera del Valencia no da para desaprovechar oportunidad de venta alguna y si finalmente no hay acuerdo podrían verse además con la obligación de encontrar otro comprador para un jugador que ni cuenta para el entrenador. Fabrizio Romano recalca que ambas entidades seguirán negociando en los próximos días, pero no hay certeza alguna de que sirva para algo.