Hugo Duro fue elegido el MVP del partido los telespectadores. Pero a pesar de ello, el delantero valencianista se marchó muy enfadado de Mestalla esta tarde por diferentes motivos.
En primer lugar, se le vio enfurecido cuando el madrileño Ortiz Arias indicó que sólo se añadirían dos minutos en el segundo tiempo. El atacante che no comprendía cómo, con tantos cambios como se habían producido en ambos equipos, podían ser sólo dos.
Y es que fue en el segundo tiempo cuando el Valencia fue en busca de la victoria y cuando el propio Hugo Duro rozó más el gol. Por eso se le hizo corta. Y así lo manifestó el jugador valencianista al finalizar el encuentro ante los micrófonos de DAZN: "Me voy cabreado porque no hemos podido ganar y porque es la primera vez que veo añadir sólo dos minutos en un segundo tiempo".
Sobre el cambio que dio el equipo tras el descanso, el atacante blanquinegro señaló lo siguiente: "Hemos corregido cosas de la presión en la segunda parte. Creo que el equipo en la segunda ha estado mejor, pero hay que dar más porque está claro que apretando sólo una parte no ganamos. El Mallorca ha hecho un trabajo muy bueno y, al final, no hemos podido".
En este mismo sentido, se mostró autocrítico y exigente para el último tramo de liga que les queda: "No sumar de tres en tres en casa, al menos para mi, se me hace corto. Yo no he estado muy preciso en los remates de cabeza. Pero bueno a pensar en el Granada e intentar hacer bueno este punto".
En el primer tiempo, el colegiado madrileño añadió seis minutos. Las lesiones de Yaremchuk y Mascarell y la revisión del penalti que señaló por posibles manos de este último le llevaron a pitar hasta el 51'. Y en la segunda parte, con siete sustituciones entre ambos equipos, sólo decidió sumar dos como prolongación. Mestalla tampoco lo comprendió y a los únicos que les pareció bien fue a los jugadores y al cuerpo técnico del Mallorca, porque así estarían más frescos para jugar la final de la Copa del Rey frente al Athletic.
La jugada que pudo cambiar el partido ocurrió en el minuto 28. El árbitro del encuentro, el madrileño Ortiz Arias decretó penalti por mano de Mascarell dentro del área del Mallorca. Y cuando todo apuntaba a que se lanzaría, le avisaron desde la sala VOR. Fue a revisarlo al VAR y corrigió su decisión tras ver cómo el esférico le había golpeado en la mano que tenía pegada en el pecho.