Fernando Ruiz5 min lecturaEl Sevilla Fútbol Club se ha visto envuelto esta temporada en una dinámica de resultados que no vivía desde hace muchísimos años. Acostumbrado a vivir en los puestos de Champions League y Europa League año tras años, lidiar esta campaña con las posiciones del descenso no es algo fácil de llevar para este equipo que en las tres últimas temporadas enlazo tres cuartos puestos consecutivos.
Pero las ventas de Diego Carlos y Jules Koundé, tan buenas en lo económico como malas en lo deportivo, no son fáciles de suplir. Si a eso le añadimos que la planificación en el resto de las posiciones también fue nefasta en líneas generales (saliendo tres este mismo mes de enero) y que a pesar de haber mejorado en enero con algunas incorporaciones, el Sevilla no termina de despegarse de los puestos de descenso, todo hace que se complique aún más a lo largo de la temporada.
Porque hace tan sólo un par de jornadas parecía que el equipo de Sampaoli iba a ser capaz de remontar el vuelo y colocarse entre los diez primeros clasificados (algo que no ha conseguido en toda la temporada), el empate ante el Rayo Vallecano y la derrota frente a Osasuna, ha devuelto al Sevilla a su realidad: luchar por la permanencia.
El Sevilla comenzó la jornada en la duodécima posición con tres puntos de ventaja sobre el primero de los equipos que marcan el descenso a Segunda división, las victorias de rivales directos como Girona, Espanyol, Celta, Cádiz y Valencia le han bajado hasta el decimocuarto puesto dejándolo tan sólo a dos puntos del descenso, y eso si esta noche no gana el Getafe al Villarreal, lo que lo dejaría a tan sólo un punto.´
Y es que este año la permanencia apunta a estar más cara que nunca, al menos más que en los últimos cinco años, y a los números nos remitimos. Nunca antes a estas alturas de la temporada, en la jornada 23, el primero de los equipos en descenso, el Valencia en este caso, tenía 23 puntos en su casillero. Hay que remontarse hasta la temporada 18/19 para ver algo similar, cuando el Rayo tenía también 23 puntos en esta misma jornada. Curiosamente el equipo vallecano tan sólo sería capaz de sumar nueve puntos hasta el final acabando como colista esta temporada con 32 puntos. El conjunto madrileño le acompañaron a Segunda el Huesca, con 33 puntos, y el Girona, con 37.
En las tres últimas temporadas, a estas alturas del campeonato el equipo en descenso que más puntos tenía era el Valladolid, con 21 en la 20/21, y finalmente acabó descendiendo en penúltima posición con 31. A Segunda división se fueron en las tres últimas temporadas el Leganés con 36 puntos (Mallorca, 33, y Espanyol, 25); el Huesca con 34 (Valladolid con 31 y Eibar con 30) y la pasada campaña, el Granada con 38 (Levante con 35 y Alavés con 31).
Así, el del año pasado fue el descenso con más puntos de las últimas temporadas, aunque a estas alturas era el Cádiz el que marcaba el límite con 18 puntos, cinco menos que el Valencia (23) a día de hoy. Por todo ello sólo cabe esperar esta temporada la permanencia más cara de los últimos años, teniendo muy posiblemente, los equipos que quieran salvarse, llegar a los 40 puntos e incluso 45 si los de abajo siguen sumando de esta forma. A día de hoy tan sólo el Elche, con nueve puntos, parece estar desahuciado salvo milagro de los de Machín.
