La temporada 2023/2024 del Sevilla FC no pasará a la historia en lo colectivo. El equipo está a punto de cerrar uno de los peores ejercicios que se recuerdan en los últimos años. Cayó eliminado a las primeras de cambio de la UEFA Champions League y en LaLiga EA Sports coqueteó desde el inicio con los puestos de descenso. Has desfilado tres entrenadores por el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán hasta que Quique Sánchez Flores encontró el camino de la tranquilidad a base de resultados. A nivel individual, la cantera se reivindica en momentos de zozobra y dudas. Hombres como Juanlu Sánchez, Isaac Romero y Kike Salas están asentados en el primer equipo y se erigen como piezas importantes en un futuro.
Es evidente que el devenir del Sevilla pasa por volver a potenciar la cantera. El Sevilla Atlético ha conseguido de manera holgada el ascenso a Primera Federación y muchos de sus jugadores se postulan a dar el salto al primer equipo. Quienes ya lo han hecho son Juanlu, Kike Salas e Isaac Romero.
En el pasado mercado invernal, el conjunto sevillista daba la alternativa a dos grandes proyectos de la cantera. Kike Salas confirmaba su permanencia a todos los efectos luciendo el dorsal '2', mientras que Isaac Romero se ganaba el sitio a base de goles en Segunda Federación. Agarró el número '20' que soltó Fernando Reges y su irrupción ha sido todo un éxito.
Kike Salas tiene la confianza de su tocayo Sánchez Flores en el club. Esta campaña, suma 23 partidos (18 de ellos de Liga) y es titular frecuente en el eje de la zaga junto a Loïc Badé y Sergio Ramos. Renovado hace poco más de un año hasta 2026, su cláusula de rescisión se ubica en torno a los 50 millones de euros, tal y como desveló hace unos días ESTADIO Deportivo.
Su papel en el equipo es crucial y no sólo en la faceta defensiva. Suma tres goles con el último anotado en el derbi contra el Betis en el Benito Villamarín. Un gol que sirvió para rescatar un punto cuando el equipo más lo necesitaba. Días antes de la disputa del partido, el central de Morón concedió una entrevista a los medios oficiales de LaLiga y la reportera ya visionaba lo que ocurriría. Tras pedirle un resultado (Salas dijo que ganarían 0-2), la periodista le dijo que marcaría y además de cabeza... un acierto de lleno.
El defensa del Sevilla vivió un partido soñado en su primera aparición en un derbi. Con 22 años tiene un futuro prometedor por delante y en los despachos de Nervión ya se frotan las manos.