“A cualquier sevillano le gusta jugar un derbi. Negarlo sería engañarlo. Pero tenemos el 100% de nuestros sentidos en el partido del jueves. Nos hemos acostumbrado a jugar este tipo de partidos, pero lo que vamos a hacer el jueves es muy gordo. Una semifinal europea, el Sevilla en 115 años de historia, hasta 2006, jamás la había jugado. En toda Andalucía se han jugado siete, y las siete las ha jugado el Sevilla. No existe nadie en la organización que esté dedicando una milésima de segundo al derbi. El derbi tocará el viernes. El partido grande que juega el Sevilla esta semana, grande no, grandísimo, es la semifinal de la UEFA que nos puede meter en una final europea, otra vez, contra la Juve”. Con esas palabras, el vicepresidente del Sevilla FC, José María del Nido Carrasco, dejaba claro en el programa 'A Balón Parado' lo que para el Sevilla es el partido del jueves y lo que será el del domingo. Al menos, por importancia, porque todos saben que, el otro, ante el eterno rival, también hay que ganarlo.
La lección la tienen todos aprendida. El derbi llega luego y primero una Juventus, a la que, de superarla, puede dejar al Sevilla a un solo triunfo de otra temporada histórica, cuando había sido la campaña peor que se había vivido en Nervión en los veinte últimos años. El equipo de Mendilibar se trajo un empate de Turín, donde su objetivo era sacar un resultado positivo para igualarlo todo con su afición, pero ahora llega con una teórica 'ventaja' que no acepta. Sobre todo porque sabe lo que tiene enfrente.
"La Juventus es el favorito. En su vestuario, en el visitante, tienen puesto en cartón los títulos que han ganado y Monchi y yo contamos 71. Y tiene casi el triple de presupuesto que el Sevilla", avisa el ejecutivo sevillista, que, no obstante, piensa como casi todos, que sobre el papel es así, pero ahora tiene que ganar en el Sánchez-Pizjuán. "Jugando nuestra competición, en nuestra casa y con nuestra gente. Por ilusión y porque nadie la quiere más que nosotros, vamos a competir. Confío en nuestro equipo y nuestro entrenador para sacar la eliminatoria. El partido de ida nos demuestra que no nos podemos relajar y tenemos que dar el 200% para que la eliminatoria se quede en Sevilla y podamos disfrutar de la final”, indicaba Del Nido Carrasco.
"Al Sevilla se le respeta muchísimo, mientras más lejos estés de Sevilla, más se le respeta", avisa el vicepresidente nervionense, quien cree que "los expedicionarios del Manchester sufrieron pánico, más que miedo”. "Estoy deseando que la Juve pise el Ramón Sánchez-Pizjuán, escuche a nuestra afición y vayamos de tú a tú en casa”, afirma, al tiempo que admite lo que significaría el triunfo en la Europa League en un año tan duro.
"Cada Europa League tuvo sus cosas. (...) Ésta tiene la particularidad de vivirse en una temporada durísima. Las ganas de disfrutar de la afición hacen que, para mí, el día del Manchester se superase el ambiente del Schalke. Había muchas ganas y el equipo hizo un partidazo. El ambiente llegando al estadio, los días previos, cómo la gente se empezó a ilusionar desde el empate en Manchester, las activaciones de tantos abonos... Con lo que se ha sufrido, el ambiente fue inigualable y la sensación en el terreno de juego era el de un equipo casi indestructible. Nosotros la queremos más que nadie y la peleamos más que nadie. Este año, jugándonos el descenso, todo el mundo hablaba de la Europa League como un problema. No hemos desistido en el empeño de pelearla y aunque podría pensarse que no era el año, estamos en semifinales", añade Del Nido Carrasco, que advierte que los aficionados sevillistas sienten que les "pertenece" y que la pueden "ganar" cada año que la juegan.
El dirigente hispalense también tuvo palabras de elogio para el último eslabón que ha traído al Sevilla aquí y a un final de temporada ilusionante, un José Luis Mendilibar que ha "caído de pie" y que "parece que ha nacido en Triana". "Cuando tomamos la decisión de cesar a Sampaoli, Pepe, Monchi, Fernando Navarro y yo nos sentamos con José Luis y todos teníamos claro que no podíamos pensar más allá del 4 de junio. Siempre lo estamos diciendo. No es que estemos contentos, estamos contentísimos. Los números son incuestionables. No queremos hablar de futuro de nadie, ni de Mendilibar ni de nadie", advierte. Ni del futuro de Mendilibar, ni del Betis. Toa el presente. Es la única forma de estar centrados.