En Nervión aún tratan de digerir el mazazo que supuso la derrota 'in extremis' ante el Villarreal. El propio García Pimienta, aun destacando el buen juego de los suyos durante muchos minutos, no podía sino reconocer que la endeblez defensiva del equipo ya comienza a ser preocupante a las primeras de cambio. “Hemos recibido cuatro goles en dos partidos, así es muy difícil", aseguró el técnico catalán a la conclusión de un choque que ha puesto de nuevo el foco en la planificación.
Tras encajar 54 tantos la pasada campaña, el Sevilla FC no sólo no ha reforzado el eje de su defensa (sólo han llegado en los laterales Barco por Acuña y el retornado Carmona en la diestra), sino que además ha perdido a Sergio Ramos, su indiscutible líder durante la 23/24. En su lugar, permanecen los mismos cinco centrales que ya hicieron aguas en el último ejercicio y en muchos casos en el anterior.
Ha sido imposible colocar a Marcao pese a ser inicialmente un descarte, cartel que ni siquiera se le llegó a poner a Nianzou ante la evidencia de que sería imposible encontrarle una salida mínimamente beneficiosa por su elevado sueldo y el pobre rendimiento ofrecido desde que aterrizó. Tampoco fue a más el interés del Al-Shabab de Arabia Saudí en Gudelj, mientras que ha sido el propio Badé el que ha cerrado la puerta a un traspaso al Stuttgart que en el club sí veían con buenos ojos. Y sin salidas, como ya ha admitido García Pimienta, no habrá entradas.
Asfixiados con el límite salarial, ni siquiera la posible marcha de Joan Jordán al Alavés (pagando buena parte de su salario) o la de Gonzalo Montiel (al que tampoco le gustó la opción del PSV Eindhoven) garantizan que se pueda acudir al mercado para reforzar al equipo en esta última semana. De poder firmar a alguien, el técnico preferiría a un centrocampista de corte creativo, pues no anda sobrado en la medular. En la defensa, en cambio, sí tiene cantidad, pero en sólo dos jornadas, el preparador barcelonés le ha mostrado la evidencia a Víctor Orta con un particular 'mensaje'.
Después de trabajar durante toda la pretemporada para intentar que su equipo adquiera las peculiaridades defensivas de un sistema que obliga a jugar con la zaga muy adelantada, el ex entrenador de la UD Las Palmas ya ha puesto en liza a sus cinco centrales. Un puesto que no se suele tocar demasiado y que en el caso del conjunto nervionense es una auténtica incógnita, a la par que un quebradero de cabeza.
Si en el Estadio de Gran Canaria fueron Gudelj y Nianzou los titulares, con el 'premio' al francés por haber sido el más utilizado durante el verano, ante el Villarreal los elegidos fueron Kike Salas, que ya tuvo unos minutos en el debut liguero tras haber salido de una lesión, y Loïc Badé, al que quizás se quiso reservar ante los canarios por sus pocos entrenamientos con el equipo (los mismos que Juanlu, que sí jugó y marcó). A ellos se suma también Marcao, que saltó al campo este pasado viernes por los problemas físicos de Kike Salas y acabó saliendo en la foto del gol de Ayoze. 180 minutos de juego y los cinco centrales ya han sido 'mostrados'. García Pimienta sólo puede asumir que "si no hay salidas, no habrá entradas". Ahora debe ser Víctor Orta el que tome nota.