Con la llegada de José Luis Mendilibar al Sevilla no va a cambiar la vocación ofensiva del equipo nervionense, pero sí la forma de llegar al arco contrario. Y su primera orden en el entrenamiento así lo deja claro. El técnico vasco quiere que su equipo haga transiciones rápidas y trate de sorprender por velocidad a sus rivales, y eso es lo que ha pedido: primer toque y rapidez.
El ex del Eibar dirige la primera sesión como sevillista apenas dos horas después de hacerse oficial su fichaje y, aunque en ella no puede contar con los internacionales (Bono, Acuña, Bryan Gil, Montiel, En-Nesyri...) tiene a un buen número de elementos para empezar a inculcar sus ideas. Entre ellos está un viejo conocido, Marko Dmitrovic, que ha renunciado a ir convocado con su selección y se ha quedado entrenando con el Sevilla.
Son baja por lesión Rekik, Erik Lamela -al que sí se le ve saludar en el gimnasio-, Marcao y Papu Gómez, como suele ser habitual en las últimas sesiones, y ha tirado de Manu Bueno, Alberto Flores y Matías Árbol para completar el entrenamiento. Alguno de ellos, al igual que el Tecatito Corona, podría contar para el próximo partido ante el Cádiz.
José Luis Mendilibar conoció a los jugadores del Sevilla FC antes de saltar al césped y empezó su trabajo con una charla con los futbolistas, en la que explicó algunas de las claves de lo que quiere.
Tras ésta, el equipo se ha entrenado con balón y el técnico vizcaíno ha pedido que haya verticalidad y ritmo, algo que espera poder plasmar en el Sevilla en los 12 partidos que le quedan a la temporada. No en vano, siempre ha sido un técnico al que le gusta que sus equipos fianlicen, algo de lo que sacó muy buen provecho en su etaa en el Eibar.
Primero, jugadas de primer toque y finalización; y luego, también rondos, en los que Mendilibar ha pedido velocidad de pelota.
El presidente del club, José Castro, así como el vicepresidente José María del Nido Carrasco, y el director deportivo de la entidad, Monchi, han arropado al nuevo técnico en su presentación ante el equipo y se han dejado ver en la sesión preparatoria vespertina, que se ha iniciado a una temperatura alta, lo que también ha hecho que la exigencia no fuera excesiva.