Óscar Murillo4 min lecturaQuedan tres sesiones matinales (jueves, viernes y sábado desde las 10:30 horas) y una final de activación el mismo domingo, día de El Gran Derbi, tras la que se conocerá la convocatoria del Sevilla FC, que apura este curso en ese aspecto. Margen suficiente, entiende el entorno de Isaac Romero, para que el mejor delantero de que dispone García Pimienta supere su esguince de tobillo y sea una opción válida para medirse con el Real Betis. Hará cambios, pese a acumular dos jornadas sin perder (cuatro puntos de seis posibles) el míster catalán, que cruza los dedos para tener al lebrijano en condiciones, después de que éste forzara la semana pasada y se resintiera. No hubo recaída en sí de la lesión que le produjo involuntariamente Joan Jordán en Vitoria, pero sí malas sensaciones, un dolor en forma de pinchazo que no acaba de desaparecer y estropeó sus planes, si bien ya va remitiendo.
Se somete fuera del radar el '7' nervionense a dobles sesiones diarias de fisioterapia y masajes, exigiendo cada vez un poco más a su articulación dañada, en general, y a la sindemosis anterior del tobillo derecho, en particular. Sin verbalizarlo para no gafarlo, el plan es trabajar antes del fin de semana, casi seguro el viernes, ya con sus compañeros, pero sin prisas ni aceleraciones vanas. De arribar en condiciones aceptables y darle su visto bueno, Isaac será la referencia blanquirroja ante el eterno rival, pues, si bien García Pimienta sigue confiando en que Kelechi Iheanacho dará un mucho mejor rendimiento, no está el primero en su rotación entre las alternativas al ex del Antoniano. Incluso, aunque Mateo Mejía le dejó una grata impresión durante su debut en Bilbao, forzando por ejemplo la expulsión de Aguirrezabala, lo más probable es que se decantase por un 'falso 9' sin Romero Bernal en la ecuación.
Todavía no se han producido las probaturas más indiciarias, pero el míster sevillista quiere mimar a Jesús Navas para que sea su extremo derecho ante el Real Betis, lo que obligaría a prescindir de Dodi Lukébakio o Chidera Ejuke. El nigeriano podría convertirse en el as bajo la manga del ex de la UD Las Palmas para desequilibrar el encuentro de máxima rivalidad en la segunda mitad, cambiando de perfil al polivalente belga, pero otra solución en la cabeza del barcelonés pasa por mantener al autor del último gol y medio de su equipo en la izquierda, percutiendo con diagonales por dentro, y adelantar al atacante de ascendencia congoleña para que oficie como punta de lanza, con Peque como última variante si no llega el palaciego o sienta a alguno de los dos alas de las jornadas más recientes. Con todo, la labor como mediapunta de su paisano no parece estar en entredicho.