El mes de junio, ya sin competiciones oficiales en liza, es un mes de despedidas que, en el caso del Sevilla FC, al menos tienen el flamante trofeo de la UEFA Europa League para alegrar un trago que siempre es complicado; sobre todo en casos como el de Bryan Gil, formado en la cantera del club nervionense, al que lleva en el corazón y donde ha disfrutado estos seis meses de cesión tanto o aún más que aquel niño que llegó de Barbate para ejercitarse cada día en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios soñando con vivir momentos como los del pasado 31 de mayo en Budapest. El joven extremo gaditano, con contrato en vigor con el Tottenham Hotspur inglés hasta 2026, se ha despedido con un breve pero emotivo comunicado a través de sus redes sociales, aceptando que ha llegado el momento de decir adiós y de hablar en pasado de esta inolvidable experiencia, en una sinceridad que contrasta con el enigmático mensaje en futuro lanzado hoy por José Luis Mendilibar referente al internacional español y a Pape Gueye: "Ya se verá".
Cabe recordar que de los tres jugadores que llegaron a préstamo al Sevilla FC en el pasado mercado invernal de fichajes, el único que lo hizo con una opción de compra fue Loïc Badé. El propio jugador, con Monchi como cómplice necesario, revelaron un secreto a voces durante las celebraciones del heptacampeonato de la Europa League: la entidad blanquirroja ejecutará la cláusula de su contrato y se hará con el 75 por ciento del pase del central francés por el montante ya acordado de 12 millones de euros (el Rennes se reserva el 25% restante).
Sobre las otras dos cesiones, por Pape Gueye había "un precio pactado" con el Olympique de Marsella (10 kilos) que será estudiado y con Bryan Gil no había ningún tipo de opción futura, por lo que habría que empezar una nueva negociación con los Spurs en el caso de que se pretendiese su continuidad. "Han estado muy bien, cada uno se va ahora a su equipo... y ya se verá", respondió Mendilibar en la rueda de prensa concedida en la mañana de este miércoles para valorar su renovación hasta 2024 como técnico blanquirrojo.
Mientras todo se resuelve, Bryan Gil asume su regreso al Tottenham y se ha despedido de "la familia sevillista" a la que, en una nota publicada en sus redes sociales, ha dado las "gracias por el cariño y por la felicidad" que le ha "hecho sentir en este corto tiempo". El internacional español, de 22 años, ha explicado que "ganar un título con el equipo que te vio crecer es la cosa más grande" que la ha "dado el fútbol", de ahí que haya sido "muy feliz en el Sevilla FC a pesar de los malos momentos sufridos" cuando el conjunto nervionense luchaba por evitar el descenso a Segunda división.
El atacante barbateño ha destacado que "esta temporada no ha podido estar más presente el 'Nunca se rinde' y la 'Casta y el coraje' que tanto definen a este club" por ser dos de los versos más emblemáticos de los himnos sevillistas. "Os deseo todo lo mejor para el futuro, os echaré mucho de menos. Viva el Sevilla FC", se despedía con emoción Bryan Gil, que en su segunda etapa como sevillista ha disputado un total de 24 partidos oficiales en los que ha marcado dos goles y ha repartido tres asistencias.
Acostumbrado a la vida nómada, Bryan Gil no escondía su deseo de echar raíces en el Sevilla FC de la mano de Mendilibar, un jugador que le ha vuelto a sacar mucho partido y con el que ofreció el mejor nivel en LaLiga durante la etapa junto en la SD Eibar. En una entrevista a ESTADIO Deportivo, el barbateño admitía: "El Sevilla FC es mi casa y aquí me siento muy cómodo, pero quedarme no depende de mí".
Pablo Machín, Joaquín Caparrós y Julen Lopetegui, en su primera etapa en el Sevilla FC (2018-2020); Javier Aguirre en el CD Leganés (19/20); el propio José Luis Mendilibar en la SD Eibar (20/21); Nuno Espírito Santo y Antonio Conte en el Tottenham (2021-2023); José Bordalás en el Valencia CF (21/22) y Jorge Sampaoli y de nuevo 'Mendi' en su segunda etapa en Nervión (22/23); más los seleccionadores nacionales Luis Enrique Martínez y Luis de la Fuente. En total, 11 entrenadores diferentes y cinco equipos en sólo cinco años. Ahora, Bryan Gil buscará gozar por fin de estabilidad. A ver qué dice el Tottenham.