Antonio José Medina4 min lecturaEl bético Borja Iglesias era una de las ds caras nuevas que se podían ver en La Romareda y el seleccionador nacional, Luis Enrique, tiró de él cuando el resultado se le puso en contra y vio que España, con lo que tenía en el campo, apenas había creado una ocasión en 65 minutos, aunque ésta acabara en gol.
La entrada del futbolista del Real Betis y la de Nico Williams decantó definitivamente el control del partido a favor del equipo español, pero Suiza se defendió muy bien de ahí al final y apenas dio opciones para la igualada. Y las dos que ofreció las sacó Sommer.
Borja Iglesias hizo lo que Luis Enrique le pidió. Fijó a los centrales, se peleó con ellos y se movió buscando abrir huecos. Y fue de lo mejor de ahí al final. Cazó un remate muy forzado quye se le fue fuera; provocó una falta al borde del área que Yéremi Pino mandó a la barrera; y aún pudo tener una clara ocasión, pero le enviaron el balón muy largo.
Ahora, España deberá ganar en Portugal para acceder a la Final Four y el delantero gallego no pierde la esperanza. "Dependemos de nosotros. Eso es lo que de inicio se buscaba. Hay que ir a ganar a Portugal, a demostrar que somos capaces de jugar partidos de este nivel y con muchas ganas. Pensamos todos lo mismo y estamos convencidos de que vamos a ir a Braga a ganar", aseguraba a Televisión Española el 'Panda'.
El nombre del delantero bético estuvo en todo momento en boca del público de La Romareda, que aún lo idolatra pese a que hace ya años que dejó el Zaragoza. Y que le apoyó en todo momento. "Estoy muy agradecido siempre que se me relaciona con esta ciudad y con el club. Solo tengo palabras de orgullo de mi parte. Les quiero mucho", indicaba Borja Iglesias, que, no obstante, se tenía que marchar con el dolor de la derrota en su debut. "La verdad es que deseaba una victoria", indicó el gallego, que, pese a todo, salió "contento" con su partido. "Intento disfrutar de los minutos que tenga y aportar el máximo", añadía.
El otro debutante, Nico Williams, también se mostró muy activo, encaró sin miedo por la banda derecha y tal vez le faltó algo de fuerza en alguna jugada para haber sacado más. El joven de los Williams, cuyo hermano debutaba ayer con Ghana, indicó que Luis Enrique le había pedido que "abriera el campo, que fuera el mismo que en el Athletic y encarase en el uno contra uno".
"Sabíamos que iban a ser unos rivales muy duros y que a balón parado eran muy fuertes. No se pudo contrarrestar y ahora en Portugal hay que ir a sumar los tres puntos. El míster nos ha dicho que no bajemos los brazos, porque esta selección nunca se rinde. En el poco tiempo que llevo he visto que los compañeros son muy fuertes mentalmente", afirmó.