Alberto Gálvez3 min lecturaHay varios equipos en la elite del fútbol español que ya llevan dos entrenadores en lo que va de curso. Algunos incluso tres, como el Villarreal. Y muy posiblemente caiga alguno más antes de final de año si las cosas no empiezan a cambiar por el Sánchez-Pizjuán, Balaídos o, incluso, Son Moix.
Así, uno de los nombres que podría salir a escena para relevar a Diego Alonso, Rafa Benítez o Javier Aguirre es el de Quique Sánchez Flores. El madrileño ha hablado para Marca y ha reconocido que está al tanto de lo que ocurre en LaLiga EA Sports por si volviese a sonar su teléfono.
Desde que saliera de Getafe la pasada campaña, el técnico madrileño está viviendo el fútbol desde otra perspectiva: "Estoy de puro observador. Hago alguna parada en Alemania para ver Dortmund, Bayern y Leverkusen... también Italia, pero sobre todo veo Inglaterra y España".
Y entre partido y partido le echa un ojo a su móvil, en el que sigue sin entrar la llamada deseada: "No me ha llamado nadie hasta ahora. Estoy viendo fútbol con la esperanza y motivación de que cuando llegue algo y sienta la emoción seré el primero en volver al banquillo".En el Atlético de Madrid lo tiene muy complicado para volver, pese a que allí consiguió una Europa League y una Supercopa de Europa, pero mientras quiera Simeone parece imposible su regreso. Al igual ocurre en Getafe, donde a pesar de ser una leyenda por las tres etapas vividas, José Bordalás parece haberse consagrado de nuevo en el Coliseum. No obstante, es hablar del club azulino y se le llena la boca de sentimientos bonitos: "Siempre ha sido una relación de amor. Siento que le he dado mucho. Considero todos mis ciclos en el Getafe como tiempo feliz, exitoso y de disfrute".
Sobre el Valencia CF, equipo al que también dirigió, también se ha pronunciado: "Lo veo con cierta preocupación institucional. Se está sosteniendo gracias a unos chavales fantásticos y a Baraja que lo está haciendo muy bien. El problema es que las ligas son muy largas y los chicos deben mantenerse dentro del top10. Si bajan de ahí puede entrar el vértigo y en esa situación ese escudo pesa mucho".
Así las cosas, Quique seguirá muy pendiente de lo que ocurra en partidos como el Mallorca-Alavés, Almería-Betis y Sevilla-Villarreal. Todos ellos se juegan el domingo, por lo que vivirá un auténtico carrusel este próximo fin de semana para intentar estar al corriente de lo que pasa en todos ellos. Por si acaso suena la flauta.