Óscar Murillo5 min lecturaNo hubo presencia sobre el campo, ya que los laterales nervionenses Gonzalo Montiel y Marcos Acuña estaban sancionados, al tiempo que el mediapunta Papu Gómez fue baja por lesión, mientras que el pivote heliopolitano Guido Rodríguez y su compañero, el central Germán Pezzella, permanecieron en el banquillo, pero la clasificación de Argentina para la final del Mundial de Qatar 2022 permitirá que, por vez primera en la historia, haya jugadores verdiblancos y blanquirrojos conjuntamente en el último partido de una cita como ésta. Por separado, ambos clubes pueden presumir de haber vivido otras dos experiencias similares, pero por separado. El Real Betis tuvo al cancerbero de la Albiceleste Nery Alberto Pumpido en Italia 1990 (a la postre subcampeón, pues se impuso Alemania) y al extremo brasileño Denilson de Oliveira en Corea y Japón 2002 (campeón), mientras que, del Sevilla FC, el carrilero Jesús Navas se alzó con el título en Sudáfrica 2010, como el mediocentro francés Steven Nzonzi en Rusia 2018.
La alegría en el Ramón Sánchez-Pizjuán podría ser plena, ya que a los cinco finalistas ya confirmados podrían unirse este miércoles otros dos si el guardameta Yassine Bono y el delantero Youssef En-Nesyri confirman la hazaña que está suponiendo la participación de Marruecos en esta fase final mundialista superando a Francia y plantándose en la lucha por el entorchado. Con ese supuesto, pasara lo que pasara en una hipotética lucha por el título entre suramericanos y norteafricanos el próximo domingo, el conjunto de Eduardo Dato se aseguraría duplicar como poco su nómina de campeones del magno evento futbolístico, porque pasará de dos a cuatro, que serían cinco de imponerse Argentina. En el bando bético, como no pueden sumar más efectivos en la otra semifinal, el cómputo podría pararse en uno o llegar hasta los tres de sumar su tercer galardón los albicelestes.
Está claro que el éxito de sus internacionales en Qatar 2022 es siempre un motivo de alegría para Betis y Sevilla, aunque el recuento de efectivos para el reinicio de LaLiga les deja muy mermados. Por ejemplo, aunque no se ha hecho pública una cifra de vacaciones, el hecho de que hayan llegado hasta aquí complica sobremanera que Acuña, Papu, Bono y En-Nesyri puedan participar en la cita de Balaídos el 30-D, ya que tres de ellos, al menos, han jugado mucho, por lo que necesitarán un mínimo descanso. Encima, el 'Huevo' meditaba operarse de pubis tras el Mundial, siendo de todas formas incluido, como el ex de Atalanta, en una lista de descartes por su actitud previa a la magna cita a orillas del Golfo Pérsico. El 'Cachete' está sancionado ante el Celta, como Nianzou y Rakitic, lo que, unido a las prolongadas lesiones de Tecatito Corona, Marcao, Alex Telles, Delaney (también con pie y medio fuera) y un Suso que ha recaído, Sampaoli se queda con lo puesto para el último encuentro oficial del año, donde no se espera tampoco a Januzaj, Isco ni Dolberg, sin posibilidad de refuerzos invernales. Dmitrovic; Jesús Navas, Gudelj, Fernando, José Ángel Carmona o Kike Salas, Rekik; Rafa Mir, Joan Jordán, Pedro Ortiz, Óliver Torres; y Lamela podría ser un once factible, a la espera de que la enfermería alivie un poco el panorama y no haya más víctimas.
En Heliópolis, más de lo mismo. Guido y Pezzella tendrán once días de asueto tras la final, por lo que opositarían, como muy pronto, al duelo copero del 3-4-5 de enero, no para el Athletic, cuando sí deben estar, pese a los pocos entrenamientos con el grupo, Sabaly y William Carvalho. La cita se la pierden Paul y Juan Cruz, por lesión, y Edgar, por sanción. Canales sí debería estar a punto, por lo que Manuel Pellegrini tiene bastantes más alternativas, de no mediar más contingencias negativas, para un once de plenas garantías formado por: Bravo o Rui Silva; Sabaly o Montoya, Luiz Felipe, Víctor Ruiz, Álex Moreno; Guardado, William Carvalho o Canales; Luiz Henrique, Fekir, Canales o Juanmi; y Borja Iglesias.