Álvaro Palomo4 min lecturaEl Mallorca atraviesa por una situación extremadamente delicada por un bache de resultados que ha encendido las alarmas en Son Moix. Los bermellones encadenan ya seis partidos sin conocer la victoria después de empatar en casa con el Getafe y únicamente suman nueve puntos en su casillero de los 33 posibles. Esta sequía de éxitos ha situado al equipo al borde del descenso, en la posición decimosexta con tan solo tres unidades de renta sobre la zona maldita.
Y es que el Mallorca no gana desde el 16 de septiembre cuando se impuso al Celta y la ausencia de señales positivas han empezado a generar debate en el seno del club bermellón acerca de la continuidad de Javier Aguirre al frente del conjunto balear a pesar de que están contentos con su compromiso y el trabajo que ha realizado. No se espera que se tome ninguna decisión drástica de forma inmediata, pues aún le resta algo de crédito al mexicano, pero ya no es un intocable en la planta noble de Son Moix y empiezan surgir voces acerca de la idoneidad de un cambio de aires en el banquillo.
En este sentido, las dos jornadas antes del nuevo parón por los compromisos internacionales, en el Benito Villamarín contra el Betis y en casa ante el Cádiz, pueden ser resultar fundamentales para el futuro del 'Vasco' especialmente la cita contra los amarillos. La ausencia de reacción antes del paréntesis liguero y la posibilidad de caer a posiciones de descenso pondrían en serio resgo la continuidad de Javier Aguirre.
Y es que el Mallorca firma uno de peores arranques del siglo en esta temporada, hasta el punto de que recuerda a la pésima trayectoria del equipo en la 04/05, con Benito Floro al frente. Por entonces, registraba únicamente seis puntos y a partir de ahí el equipo isleño nunca ha presentado guarismos tan bajos hasta ahora, cuando una sola victoria lastra el arranque de un equipo que sufrirá si no empieza a ganar partidos cuanto antes
También llevaba una sola victoria Benito Floro aquella campaña cuando en la jornada ocho, tres menos que ahora, la directiva bermellona tomó la decisión de despedir fulminantemente al exentrenador del Real Madrid. Héctor Cúper ocupó el cargo en su segunda etapa en Son Moix y logró salvarlo. De momento, Aguirre está disfrutando de más chance.
Eso sí, existe un precedente mucho más cercano que da esperanzas al Mallorca, pues el curso pasado los números del equipo solo mejoraban en un punto a los actuales, si bien hubo un arreón justo antes del parón por el Mundial, con un saldo de nueve puntos de 12, que le permitió respirar y tomar distancia con el descenso. Javier Aguirre necesita una reacción similar para no perder su puesto en el banquillo mallorquín.