El bache de resultados que atraviesa el CD Leganés lo tiene a sólo dos puntos de los puestos de descenso y eso que el Espanyol aún tiene un partido pendiente. Suma tres partidos consecutivos sin ganar y una imagen muy cuestionada. La Real Sociedad se paseó en Butarque el pasado domingo ganando por 0-3 con goles de Brais Méndez, Barrenetxea y Mikel Oyarzabal. Uno de los pesos pesados en la plantilla pepinera es Renato Tapia. El peruano fue el fichaje estrella en el retorno a Primera división. No se esconde, no se arruga y ahora sale al paso de las críticas que le llegan no solo en España sino también en su país natal.
El pivote tiene clara la consigna a seguir tras los últimos resultados adversos: "Hay que pensar en hacer los 35-37 puntos posibles para poder estar peleando a final de temporada lo menos posible", comentó además de lanzar una advertencia al grupo: "Nos estamos enfocando más en lo que hace el rival que en lo que debería proponer el Leganés, especialmente en casa, donde muchos equipos vienen y sufren. Independientemente de si se juega bien o mal, las ganas de ganar no se pueden perder", desveló en una entrevista mantenida en el pódcast Hora Blanquiazul.
Renato Tapia militó cuatro temporadas en el Celta de Vigo y en algunas campañas se vio inmerso en pelear en la zona baja. Tiene experiencia en ello. Comentó cuál es el camino: "Lo más importante es la unión. Los partidos se ganan haciéndote fuerte en el grupo. El Leganés tiene que ser un equipo que tiene que meter presión desde que comienza hasta que acaba el partido", recordó. Fue uno de los jugadores más afectados tras la derrota frente a la Real Sociedad analizando el choque en zona mixta con precisión.
Jugando esta temporada como centrocampista y a veces de central a las órdenes de Borja Jiménez, el pepinero explica ese cambio de rol: "Cuando el rival juega con un mediapunta con llegada o un falso nueve, Borja trata de tirarme un poco más atrás y, a partir de ahí, saltar. La verdad es que me siento muy bien, es una posición en la que me encuentro cómodo", detalla.
Alaba la predisposición de Butarque el clima que se genera en el estadio los días de partido: "En Butarque la gente está muy cerca del jugador, me gusta esa estructura de estadio. Se hace sentir muchísimo y nos ayuda a motivarnos".
Por último se adentró en el tema de las críticas que sufre en Perú por portar el brazalete de capitán. Tiró de ironía pero asegura que no le afectan: "Para eso está el FIFA, para poner al capitán que tú quieras... Soy una persona muy pasota, no me importa lo que diga la gente. Si creen que no tengo compromiso o lo que se inventen... yo sé lo que he hecho por la selección. Estoy tranquilo conmigo mismo", dejó claro en la entrevista.