Alberto Gálvez4 min lecturaLa remontada del Getafe en LaLiga está siendo para enmarcarla si no se estropea de aquí a que ésta concluya. Con Quique Sánchez Flores cuestionado por la directiva azulona y con varios ultimátums encima de su mesa, el equipo madrileño ha conseguido encadenar dos partidos sin encajar un gol y una sola derrota en los últimos ocho encuentros.
Tras la derrota ante el Real Betis en el Coliseum Alfonso Pérez (0-1), el cuadro getafense ha sabido sacar petróleo en todos sus partidos, excepto con el Villarreal (2-1), al que también le compitió en La Cerámica. Y esta positiva racha le ha servido para salir de los puestos de descenso y tener un colchón de tres puntos sobre la zona peligrosa de la tabla.
Además, en esta dinámica ha conseguido importantes resultados, como los empates en el Metropolitano y en San Mamés, así como la crucial victoria ante el Sevilla en su feudo.
Sin embargo, ahora preocupa otro frente en las oficinas del 'Geta'. Y es que el próximo mes de junio acaban contrato hasta once jugadores, seis son cedidos, por lo que el club presidido por Ángel Torres deberá ponerse cuanto antes a atar flecos y provocar reuniones si no quiere sufrir una auténtica desbandada el próximo verano.
Muchos de ellos son conscientes de que, posiblemente, su futuro en el club dependa de la continuidad de este en Primera y viendo que el último rival es el Valladolid, las reuniones para configurar la plantilla de la 2023-24 podrían comenzar tras el partido que se disputará en el Estadio José Zorrilla el 4 de junio.
Entre los cinco restantes que no son cedidos se encuentran: David Soria, Kiko Casilla, Damián Suárez, Ángel Algobia y Munir El-Haddadi. Y de todos estos, el que podría ser más complicado de retener es el caso del meta Soria quien, a sus 30 años, tiene un valor en el mercado de 10 millones de euros. Según apunta EFE, Ángel Torres podría haber abordado su caso de forma similar al de Mauro Arambarri, con quien se llegó a un acuerdo de renovación hasta junio de 2025 desde la más absoluta discreción.
En el capítulo de los cedidos, el uruguayo Gastón Álvarez, en condición de préstamo por el Boston Rivers de su país, podría seguir si el Getafe consigue este año la permanencia, ya que en su contrato hay una opción de compra obligatoria. Asimismo, el central Omar Alderete, cedido por el Hertha Berlín, es un fijo para Quique y, si no hay sorpresas, el conjunto madrileño ejercerá su opción de compra.
Por contra, los cuatro cuya continuidad están más en el aire son: Portu, sobre quien existe una opción de compra de 3,5 millones de euros; Gonzalo Villar, cedido por segunda temporada consecutiva en el mercado de invierno por el Roma; Juanmi Latasa, en su caso prestado por el Real Madrid y sobre el que el Getafe tiene una opción de compra del 50 por ciento de los derechos del delantero blanco; y Jordan Amavi, quien acabará regresando al Olympique Marsella, después de su poco protagonismo en el equipo azulón.