La RFEF, desde hace meses, tiene varios frentes abiertos. También con el fútbol femenino. Más allá de los diferentes conflictos que se han producido en los últimos tiempos en la selección española, con Montse Tomé como gran protagonista, los torneos que organiza el ente ahora presidido por Rafael Louzán han captado la atención de todos los seguidores. En especial, la Supercopa de España que, a apenas un mes para su disputa, no ha confirmado oficialmente el escenario en el que se va a disputar. Esto, evidentemente, es un problema logístico de primer nivel, no solo para los clubes que la van a disputar, sino para las aficiones, que necesitan conocer cuanto antes cuándo se va a producir para poder desplazarse y organizar el viaje. Parece que, poco a poco, se va desentrañando este asunto, que se ha enquistado, casi como cada año.
Tal y como apunta Relevo, Leganés y el estadio de Butarque son los grandes favoritos para, una vez más, albergar un campeonato en el que harán acto de presencia FC Barcelona, Real Madrid, Atlético y Real Sociedad. Este torneo, que se disputará entre el 22 y el 26 de enero, parece que verá la luz esta misma semana, que es cuando se prevé que se anuncie el acuerdo con la localidad de la región de la capital de España.
Después de que este mismo escenario albergara el torneo la pasada temporada, hay que responder a la mayor pregunta que se hace todo el mundo: ¿por qué se vuelve a celebrar en Butarque? En este caso, la RFEF, aunque es la organizadora, no tiene ‘toda’ la culpa del retraso del anuncio de la entente. Cierto es que contaba con varias ofertas encima de la mesa, pero muchas de ellas eran más de palabra que por escrito, algo que no ayuda a que se pueda acelerar el proceso.
El calendario del fútbol masculino, en el caso de que se llegara a disputar en un estadio de dicha disciplina, tampoco ayuda a que el acuerdo se acelere, además de que hay otras propuestas que no terminan de cerrarse por las exigencias de la RFEF en cuanto a promoción y crecimiento del fútbol femenino se refiere. En el caso de Butarque, dado que el Leganés juega ese fin de semana fuera de casa ante el Athletic, parece que es el escenario ideal para la disputa de una nueva Supercopa de España.
Eso sí, la RFEF no es inocente en todo este asunto. El ente federativo podría haber cerrado este acuerdo desde hace meses, cosa que no se ha hecho. A pesar de que ha contado con elecciones, algo que, lógicamente, hace que se retrasen todas las decisiones, lo cierto es que, en los últimos años, aun sin comicios, se ha retrasado hasta última hora esta decisión. De hecho, en el 2023, el anuncio se tuvo que esperar hasta finales de diciembre, con el trastorno que esto supone para todos los implicados.