Francisco Salas3 min lecturaLa noche del Mallorca en cuartos de final de Copa del Rey ha sido "perfecta". Ante el Girona, líder de LaLiga y uno de los equipos más en forma del fútbol europeo, el equipo de Javier Aguirre ha dado un exhibición, en la que ha demostrado efectividad, fortaleza física, resiliencia y un saber competir que les hace un rival muy peligroso de cara a las semifinales.
Ante un equipo que les hizo cinco goles en liga y que venía de tres meses sin perder (el único capaz de doblegarlos había sido el Real Madrid), el planteamiento del mexicano ha sido milimétrico. Tras los primeros cuarenta y cinco minutos han conseguido una renta de tres goles, que han mantenido de forma agónica en la segunda mitad. Pese a quedarse con un hombre menos, han sido un muro infranqueable para los catalanes. Eso sí, el plan de partido estaba orquestado desde la goleada en Montilivi, como ha confirmado el 'Vasco' en rueda de prensa. "Aprendimos mucho de esa derrota, hoy no les dimos espacios y estuvimos muy ordenados y serios", declaró el veterano preparador.
El gran héroe de la noche ha sido el bloque, pero si hay destacar a un hombre, sería Abdón Prats. El doblete del balear, con un zurdazo desde fuera del área y un penalti perfectamente ejecutado, ha sido muy celebrado por el banquillo. De hecho, Aguirre ha confirmado que tenía "una apuesta" con el 9, aunque no ha revelado de que se trata.
El paso previo a la final se complica "aún más", ya que cambia el formato, que pasa a ser de doble partido. Pese a que Son Moix es una caldera, las opciones para enfrentarse son la Real Sociedad, que venció al Celta; el ganador del Athletic-Barça, y el del Atlético-Sevilla. Cualquiera de ellos será "muy difícil", pero confía en las opciones de los suyos.
Para llegar hasta aquí, el conjunto de la isla ha disputado cuatro duelos, todos ante equipos de menos categoría. Pero pese a que han ido pasando rondas sin que recibieran ningún gol, "no ha sido fácil", como se vio ante el Tenerife, donde vencieron en el último minuto de la prórroga. Esta noche si les han marcado, pero el ambiente copero de su estadio, que después de dos años volvía a tener una eliminatoria, les ha catapultado para mantener la racha de encuentros sin perder. Ahora tendrán que ponerse en modo liga, en la que deben alejarse del descenso, mientras no se olvidan de la penúltima ronda del torneo del ko, cuya ida disputarán en dos semanas.