Sólo hay que ver el multitudinario recibimiento de la afición del Ankaragücü a Jesé Rodríguez, con más de 10.000 personas convirtiendo el aeropuerto de la capital turca en la tribuna de un estadio de fútbol, sirve perfectamente para entender hasta qué punto llega la 'locura' de los otomanos por el 'Deporte Rey'. La excesiva pasión de la hinchada en Turquía tiene, obviamente, su reflejo en la siempre agitada prensa local, quien después de semanas informando sobre una posible ofensiva de Fenerbahçe y Galatasaray en William Carvalho ahora dan la sensación de haberse olvidado del internacional portugués... pero no del Real Betis.
Ahora el nombre que acapara los focos mediáticos en Turquía es Marc Bartra, quien ha vuelto con fuerza a la agenda del Trabzonspor, club con el que ya fue relacionado con fuerza el pasado mes de junio. Ahora, la noticia desvelada por Mundo Deportivo y que apunta a que el central catalán habría rechazado la primera oferta de renovación que le ha presentado el Real Betis, ha resucitado ese interés y los medios otomanos han pasado de un obsesivo seguimiento a la situación de Carvalho a ilustrar con la foto de Bartra constantes informaciones.
La situación es muy similar a la de Carvalho. Marc Bartra, que esta temporada ha subido notablemente el nivel en comparación con los dos cursos anteriores, tiene contrato en vigor hasta el 30 de junio de 2023. El Betis, como ha hecho con el portugués, le ha ofrecido la renovación para seguir contando con sus servicios y, en el caso de que no haya acuerdo para esta ampliación, entenderá que ha llegado el momento de plantearse un traspaso en éste o, a más tardar, en la próxima ventana de fichaje, para evitar que se marche a coste cero el próximo verano.
Otro punto en común con el 'caso Carvalho' es que Turquía vive a día de hoy con una inflación disparadísima que hace inviable que los clubes de fútbol puedan plantearse pagar cifras altas por traspasos. Así, la práctica de la mayoría de equipos es intensificar aún más la habitual costumbre de intentar seducir a futbolistas con salarios jugosos, pero con pírricas propuestas a sus equipos de origen. Tanto es así, que el precio puesto por el Betis de 8 millones de euros al contado y de 10 kilos si se desea abonar en plazos, ha sido el hecho determinante para que Fenerbahçe y Galatasaray se hayan retirado de la supuesta puja por Carvalho, a quien sí le garantizaban sus 2,2 millones de ficha anual.
Cabe esperar un escenario más que similar con Bartra que, aproximadamente, se movería en esas cifras en caso de que llegue alguna propuesta a las oficinas del Benito Villamarín.Bartra, por su parte, siempre habla maravillas del Betis y ya ha rechazado propuestas en el pasado para continuar vistiendo las trece barras. No obstante, Mundo Deportivo asegura que esa primera oferta de renovación que ha recibido es a la baja y está lejos de satisfacer sus demandas. El central, mientras su futuro se resuelve, no tiene la más mínima intención de forzar y seguirá trabajando, concentrado desde ya en el reto de crecimiento que afrontan los verdiblancos en este tercer curso de la mano de Manuel Pellegrini.