Sevilla - Betis: Aunque los triunfos lo tapan todo, a los dos les meten mano los de siempre

El VAR dejó sin sancionar un penalti de Cuadrado a Óliver Torres en el Sevilla-Juventus, al tiempo que el tanto del Rayo ante el Betis no debió subir al marcador

Sevilla - Betis: Aunque los triunfos lo tapan todo, a los dos les meten mano los de siempre
El penalti del jueves y el fuera de juego del lunes. - Lince / @LaLigaenDirecto
Óscar MurilloÓscar Murillo 4 min lectura

A estas alturas, da igual, porque ambos vencieron en sus últimos encuentros oficiales y llegarán reforzados al derbi de este domingo (21:00 horas) en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Pero el árbol de los resultados no debe tapar el bosque de la indignación general, en este caso personificada en Sevilla FC y Real Betis, por la labor de los colegiados que la RFEF o la UEFA ponen al frente del VAR semana tras semana. Los errores de apreciación son flagrantes, hasta el punto de perpetuarse fallos del colegiado principal o de sus asistentes, en teoría carne de corrección desde las salas habilitadas para el videoarbitraje. Lo más habitual es que se tarde un mundo en trazar las líneas que demuestran la posición legal o ilegal del futbolista de turno, si bien suelen quedar desmontadas después por las cuentas especializadas, con herramientas seguramente menos sofisticadas, pero manejadas por arquitectos o profesionales del gremio.

Todo debería solucionarse si Tebas y Rubiales llegan a un acuerdo para cofinanciar la implantación del fuera de juego semiautomático, que podría llegar en la 23/24. La UEFA ya lo utiliza en varias de sus competiciones y la RFEF lo probó en la pasada Supercopa de España, aunque se trata de un sistema caro. En teoría, el SAOT, que así se llama la patente, reacciona en menos de 25 segundos, recreando en 3D una jugada a partir de 12 cámaras y 29 puntos de acción, por lo que sería mucho más fiable del VAR, con cuya empresa hay que renegociar las condiciones, pues el contrato en España acaba el próximo 30 de junio de 2023, pero genera dudas. Por ejemplo, tras aplicarse en el Mundial de Qatar, 'se comió' jugadas tan claras como el balón que sale por la línea de fondo en el España-Japón y que acabó en tanto de los nipones. En el reciente Real Madrid-Manchester City de la Champions, no entró a valorar si el esférico salió de banda antes del empate mancuniano, aunque los expertos indican que hubo una acción posterior y que, entonces, no tenía que ser rearbitrado, aunque una TV sí lo usó y señaló el error.

Mientras tanto, los clubes siguen en manos de árbitros que miran un monitor. Y, por ejemplo, el Sevilla sufrió al neerlandés Van Boekel, que no vio penalti en la clarísima falta de Cuadrado a Óliver Torres al filo del descanso. Un contacto evidente y, según las repeticiones, dentro del área o como mucho sobre la línea que la delimita, por lo que, pese a que el principal (Makkelie) tampoco vio nada, debió señalarse un penalti que podría haber reducido el desgaste nervionense, que logró remontar en la prórroga para plantarse en la final de la UEL. El periodista y comentarista Aitor Lagunas desvelaba que el ínclito colegiado de los Países Bajos ha estado implicado en varias acciones polémicas, generalmente sin acierto, por lo que llueve sobre mojado. Y aquí seguimos en las mismas. El Betis, que terminó venciendo el lunes pasado al Rayo por 3-1 sobre la bocina, mereció llegar al epílogo con más tranquilidad, imposible al validarse el 2-1 de Santi Comesaña a pase de un Fran García que luego se demostró que estaba en posición ilegal. Arbitraba el canario Pulido Santana, con el berciano González González en la sala VOR. El tanto, además, venía precedido de una falta sobre Guardado que se fue al limbo.